26 de octubre 2009 - 08:55

Crece la polémica entre Provincia y Ciudad por el tope horario a boliches

Mauricio Macri y Daniel Scioli.
Mauricio Macri y Daniel Scioli.
Una nueva intensidad cobró la disputa entre los gobiernos porteño y bonaerense por la iniciativa de la Provincia de aplicar topes horarios a los boliches bailables en el distrito, con declaraciones cruzadas de funcionarios de ambas administraciones.

Mientras Daniel Scioli le puso dramatismo a la cuestión al señalar que "hay que poner límites a la masacre de jóvenes", el secretario general de la comuna porteña, Marcos Peña, consideró que la propuesta que impulsa el gobernador bonaerense es sólo "una maniobra mediática".

Scioli, en declaraciones realizadas durante un acto en la localidad de Arroyo Charlín, advirtió que "hay que poner límites a la masacre de los jóvenes que mueren en accidentes de tránsito porque están alcoholizados".

"La Ciudad de Buenos Aires da vueltas con el tema, pero yo le pido que no lo piensen en el término de concesión política o que van a estar cediendo ante una iniciativa del gobierno provincial", sostuvo el gobernador en declaraciones realizadas en la localidad de San Fernando, donde recorrió obras en distintos arroyos y canales con el intendente Osvaldo Amieiro.

En ese sentido, insistió en pedirle al Gobierno de la Ciudad que "avance en el mismo sentido" de la ley que tendría sanción definitiva por parte de la Legislatura provincial esta semana y que -entre otros aspectos- obliga a los boliches a cerrar a las 5:30, con posibilidad de extender en el verano el horario hasta una hora más tarde en la Costa Atlántica.

En términos incluso más altisonantes se expresó hoy el jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, quien criticó a Mauricio Macri al considerar que toma "medidas inconsultas" y lidera un "gobierno autista" en la Comuna porteña.

Pérez exhortó a Macri a "escuchar más los reclamos de la sociedad, que pide límites a la nocturnidad, y no tanto a los lobbies de los boliches".

"Ser gobierno de una ciudad autónoma no quiere decir ser gobierno de una ciudad autista", aseguró el funcionario, en declaraciones formuladas en la Casa de Gobierno, tras adherir junto al ministro del Interior nacional, Florencio Randazzo, a la "licencia única de conducir".

El viernes último, Scioli se había mostrado preocupado porque la Ciudad no quiere acompañar la aplicación del tope horario a los locales bailables y había reclamado que al menos desde el Gobierno comunal se deslice "una propuesta superadora".

Mientras funcionarios porteños comentan entre sus allegados que sienten que la Provincia los está "apretando" para que adopten medidas similares, Peña alzó la voz para responder a Scioli y advirtió que la restricción al horario de los boliches "no es la solución" al problema del alcohol.

Asimismo, emparentó la iniciativa del Gobierno bonaerense con una una "maniobra mediática".

Según indicó en declaraciones periodísticas, el secretario de Gobierno defendió "los consensos y la prevención" como la mejor forma de cuidar a los jóvenes.

También destacó el rol que cumple la página saliseguro.com.ar en la que el Gobierno porteño incluye un listado de locales con antecedentes graves o sancionados por no cumplir con las normas establecidas, para que los conozcan tanto los jóvenes como sus padres.

Por otro lado, acusó a las autoridades bonaerenses de no tener "vocación de coordinar" acciones de prevención, en una nueva jornada de declaraciones cruzadas entre ambos gobiernos, en medio de un clima que se recalienta por los topes horarios propuestos al funcionamiento de los boliches.

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