24 de julio 2016 - 19:23

Masiva marcha de la oposición en Turquía contra el fallido golpe

Miles de ciudadanos coparon la plaza de Taksim.
Miles de ciudadanos coparon la plaza de Taksim.
Miles de turcos repudiaron este domingo en Estambul el golpe de Estado fallido del 15 de julio y desfilaron a favor de la democracia, con el fundador de la república, Mustafá Kemal Ataturk, muy presente en la marcha.

La figura que presidió el mar rojo de banderas turcas no fue la del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, sino la del padre y fundador de la Turquía moderna, una república laica.

"Somos soldados de Mustafá Kemal" Ataturk, entonaba la multitud reunida en la plaza de Taksim, el lugar donde tradicionalmente se congregan las protestas en Estambul.

"Turquía es un país laico y debe seguir siéndolo", dijo Esra, una jubilada de 66 años que no quiso dar su nombre completo. Esta opositora a Erdogan afirmó que "reza" para que los golpistas no ganen un día.

Todos los manifestantes salieron a la calle con el objetivo de expresar su oposición a los golpistas, pero también sus inquietudes con respecto al estado de emergencia y a las masivas purgas que se están efectuando en las instituciones públicas.

La represión de los golpistas sigue siendo durísima. El número de los arrestados se elevó a 13.165. Entre ellos, 8.838 militares (de los cuales 123 generales y almirantes), 2.101 magistrados, 1.485 policías, 52 autoridades administrativas y 689 civiles.

"Yo estaba contra el golpe militar y estoy contra el golpe de Estado civil" que quiere articular Recep Tayyip Erdogan, afirmó Kemal, un joven de 30 años.

Osman Can, un profesor de 33 años, no escondía que "tiene miedo al futuro".

"Todos estos profesores despedidos o detenidos, podría tocarme a mí (...) mucha de la gente arrestada es inocente", dijo este manifestante que quiso precisar que no tiene ninguna relación con el clérigo Fethullah Gülen, un predicador que vive en Estados Unidos y que el gobierno acusa de instigar el golpe.

La manifestación fue congregada por el principal partido de la oposición, el Partido Republicano del Pueblo (CPH, laico y de centro izquierda), considerado como un heredero de Ataturk, y cuyos parlamentarios no apoyaron la instauración del estado de emergencia el 21 de julio.

Pero el llamado fue más transversal y miles de personas se acercaron a la plaza ,vigilada por un helicóptero, acordonada por blindados y vehículos antidisturbios. Para entrar había que someterse a tres registros.

El mensaje en unos baños cercanos no dejaba lugar a dudas: "Prohibido a los golpistas".

Si la bandera de Turquía alcanzaba un precio de cinco liras (menos de dos euros) el retrato de Ataturk cuatriplicaba el valor.

"¡Con las banderas turcas! ¡Saquen las banderas turcas!", increpó un hombre a un grupo de sindicalistas con sus propios emblemas.

"Yo había venido una vez a la plaza de Taksim en la noche para una vigilia, pero había muchos partidarios del gobierno. Hoy hay muchos simpatizantes del CHP. Lamentablemente no hay unidad", contó Onur, un estudiante.

En la manifestación se mezclaron tendencias.

"El más grande es Ataturk", grita una joven vestida de rojo. Un grupo de mujeres con velo responden "el más grande es Alá" y un tercer manifestante interviene para increparlas.

"¡Salgan! Esto no es una república islámica, es una república laica", afirmó.

Emre, un hombre acompañado de su esposa y sus bebés salió de la plaza un poco decepcionado de "tantas consignas políticas".

"Nuestro país necesita paz y unidad", aseguró.

Los ataques contra presuntos partidarios de Fethullah Gulen, acusado por Ankara de estar detrás del golpe de Estado fallido, continúan sin disminuir. Las fuerzas de seguridad turcas arrestaron en la provincia de Trebisonda, sobre el Mar Negro, a Halis Hanci, considerado el "brazo derecho" del imán.

En el lugar de los "gulenistas" arrestados, Turquía decidió en tanto contratar a cerca de 20.000 nuevos profesores. Hasta ahora, Ankara suspendió a unos 21.000 docentes de escuelas públicas y revocó la licencia de enseñanza a igual número de profesores de escuelas privadas.

Asimismo, Amnistía Internacional reiteró las denuncias de maltratos por los arrestos, ya conocido en los días pasados también con algunas fotos shockeantes.

Hay "pruebas creíbles" que los detenidos "son sometidos a palizas y torturas, incluso violación, en los centros de detenciones oficiales y no oficiales", sostuvo la ONG, pidiendo a Ankara abrir a los observadores internacionales cuarteles, centros deportivos y tribunales donde sean mantenidos los golpistas.

Dejá tu comentario

Te puede interesar