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Jujuy: tradiciones ancestrales y mucho más
Costumbres ancestrales, patrimonio cultural y paisajes de singular belleza. Es la propuesta de Jujuy, que se complementa con una interesante oferta hotelera y exquisita cocina regional.
La Quebrada de Humahuaca es un extenso valle montañoso ubicado en el extremo noroeste de Jujuy. Declarado Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad por la UNESCO, en 2003, tiene características excepcionales. A lo largo de 10.000 años, ha sido el escenario de gran parte de los desarrollos culturales de la región y de los países vecinos. Su recorrido se inicia con la instalación de los primeros pueblos cazadores, hace unos diez milenios. En tal sentido, la Quebrada de Humahuaca ha funcionado como permanente vínculo de territorios y culturas desde el Atlántico al Pacífico, y desde los Andes a las llanuras meridionales.
Vasta región compartida con Perú, Bolivia y Chile, con coloridos cerros de gran altura (más de 3.400 msnm), la Puna (altiplano), es de clima frío y seco de altura, con vegetación poco desarrollada y fauna típica andina.
La idiosincrasia ancestral de los pueblos andinos se remonta a tiempos prehispánicos, que -gracias a las costumbres y tradiciones de los pobladores- se han preservado a través de los tiempos. El turismo ofrece una interesante variedad de actividades: montañismo, observación de flora y fauna, o festividades locales como el toreo de la vincha.
De tupida vegetación, rica fauna y clima cálido todo el año, las yungas (selvas subtropicales de montaña) invitan al misterio y al asombro permanente. El Parque Nacional Calilegua, permite pasar revista a una variedad biológica asombrosa conectando con la naturaleza sin alterar el ecosistema.
La aventura es la mejor propuesta para disfrutar de bellos parajes: ecoturismo, caminatas (de 15 minutos a 7 horas) y circuitos en bici, avistaje de aves y otros animales o travesías fotográficas.
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