• DIRIGIDA POR HIROKAZU KOREEDA, ES EL RETRATO DE UN GRUPO FAMILIAR QUE ATRAVIESA UNA CRISIS El director es un gran observador del hombre común y maestro del cine calmo pero intenso.
Dos tormentas se aprecian en esta historia: la que siente el personaje protagónico dentro de su alma insatisfecha, y un tifón que lo obliga a refugiarse con su ex mujer y su hijo bajo el techo de la anciana y pícara madre. La ex mujer lo aborrece, el hijo le tiene relativo aprecio, el hombre debe sincerarse y crecer. Y la vieja está de vuelta.
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Ahora, ¿cómo pinta esas turbulencias del alma y del cielo Hirokazu Koreeda, el suave autor de "Un día en familia" y "Nuestra hermana pequeña"? Gran observador del hombre común, preciso conductor de actores impecables, maestro del cine calmo pero intenso, narrador de extrema sutileza y comprensiva piedad, él sabe expresar mucho con muy pocos elementos, y muy controlados. Es admirable la forma en que va preparando el clima, alternando sol y nubes, para la descarga que forzosamente habrá de ocurrir, en una serie de diálogos preciosos, reconocibles y a veces regocijantes, muy bien jugados. Luego, tras una tormenta, ya se sabe, el aire se respira más limpio. Y a veces el desastre que parecía traer, no resulta tan grave. Y la película es hermosa, llena de una limpia emoción. Y con algunas enseñanzas sobre la vida y las personas, para quien quiera recibirlas.
Conviene tener en cuenta, aunque cueste un poco, los nombres de los protagonistas: Hiroshi Abe, Kirin Kiki (experta en papeles de vieja desde que era joven), el pibe Yoshizawa, la ascendente Yoko Make. Y, por supuesto, los maestros que inspiraron a Koreeda: el venerable Ozu, Mikio Naruse, Kenji Mizuguchi.
"Después de la tormenta" ("Umi yori mo mada fukaku", Japón). Dir.: H. Koreeda. Int.: H. Abe, Y. Make, K. Kiki, S. Kobayashi.
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