22 de mayo 2018 - 21:21

Sica estimó una inflación a diciembre entre 26%-27% y un crecimiento del 1,7% PBI

Sica estimó una inflación a diciembre entre 26%-27% y un crecimiento del 1,7% PBI
Entrevista de Liliana Franco.-

El economista Dante Sica, en diálogo con ámbito.com, analizó la crisis cambiaria, sus efectos, el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y celebró la decisión de nombrar a Nicolás Dujovne como coordinador de las áreas económicas medida que "todo el mercado venía reclamando".

El director de ABECEB advirtió que "la ratificación del gradualismo como único camino factible de estabilización no dejará que estemos totalmente exentos de un nuevo traspié si las cosas se ponen más feas en el exterior".

En este sentido, señaló que "hacia adelante vamos a tener que seguir sorteando tests" y recordó que el 21 de junio vencen $ 650 mil millones de LEBACS. Sica, un economista de consulta del presidente Mauricio Macri, advirtió que "sería bueno conocer la letra chica del acuerdo con el FMI unos días antes de la próxima licitación". La revisión de las proyecciones económicas fue otro de los temas abordados en la charla mantenida con ámbito.com.

P.: ¿Cree que la corrida ya fue superada? ¿Qué pasará con el próximo vencimiento de LEBACS?

D.S.:
Si bien el BCRA no se vio en la obligación de vender divisas desde el 16/05, interviene implícitamente al ofrecer al comienzo de cada rueda órdenes por u$s5.000 millones a $25, imponiendo así un techo al valor del dólar y aplacando expectativas devaluatorias por parte del sector privado. Lo que sí queda claro es que las expectativas devaluatorias se han aplacado y la oferta privada de divisas volvió a asomar la cabeza en la plaza local. No obstante, la misma actitud precautoria de la autoridad monetaria da cuenta de que la guerra no está aún ganada. De hecho, las medidas tomadas hasta aquí sirven para asegurar el ingreso de divisas en el corto plazo, pero poco hacen para aplacar las vulnerabilidades de la economía argentina frente a shocks externos o internos. Hoy se ha abierto un compás de espera hasta tanto las autoridades concluyan las negociaciones con el FMI y queden definidas las condicionalidades que deberá aceptar la Argentina para acceder a la asistencia. En ese contexto, la incertidumbre permanece elevada en el corto plazo, lo cual se refleja en la alta volatilidad que exhiben las variables financieras. Y la realidad es que hacia adelante vamos a tener que seguir sorteando tests. El vencimiento de $ 650 mil millones el próximo 21 de junio se presenta como un desafío. Sería bueno conocer la letra chica del acuerdo con el FMI unos días antes de la próxima licitación. De cualquier manera quedó claro que la corrida fue controlada y la expectativa es que será exitosa la próxima licitación

P.: ¿Pudo haber sido peor?

D.S.:
El gran riesgo al que estuvimos expuestos en las últimas semanas es que la corrida cambiaria se transforme en una corrida bancaria, afectando el nivel de depósitos del sector privado tanto en moneda local como extranjera, lo cual nos hubiera llevado irremediablemente a un set de políticas de ajuste más severas y a una nueva recesión. Tal como se advirtió recientemente, la batería de medidas aplicadas por el Gobierno tuvo éxito para afectar expectativas y la corrida cambiaria se detuvo hasta el momento, lo cual nos aleja sensiblemente de caer en un escenario como ese.

P.: El nivel de tasas es un factor de preocupación para las empresas. ¿Cuánto tiempo más tendremos que convivir con estas tasas?

D.S.: La suba de tasas anterior, iniciada en marzo de 2016, fue menor a la actual (+7,4 bp vs +12,75 bp), y el BCRA empezó a bajarlas dos meses después (principios de mayo de 2016) de forma gradual, tardando hasta fin de junio para volver a un nivel similar al previo a la suba. Hoy el margen de maniobra del BCRA parece ser menor. Incluso las declaraciones de Macri y del propio Stuzzeneger dieron cuenta de la vuelta a antes del 28 D, donde el foco de la política monetaria estaba en des inflacionar la economía.

P.: ¿Cómo ve la inflación y el dólar?

D.S.: Si bien es muy prematuro para extraer conclusiones definitivas queda claro que los acontecimientos recientes han derivado en una re calibración de las proyecciones macroeconómicas de corto plazo, hacia un escenario más negativo con mayores tasas de inflación y devaluación, menos crecimiento, más incertidumbre y caída de la imagen del gobierno de lo que se esperaba tiempo atrás. Hoy las previsiones muy preliminares apuntan a una tasa de inflación que podría ubicarse entre 26%-27% en diciembre de 2018, dependiendo del sendero y el valor de la paridad cambiaria a fin de año. Si el tipo de cambio logra estabilizarse en torno a los $25 hay chances de que la inflación observada a fin de año está en el piso inferior del rango.

P.: ¿El gobierno decidió sacrificar actividad con las medidas anunciadas, partiendo de la base de que el mensaje sea bien recibido? ¿En cuánto estima el recorte del PIB?

D.S.: En materia de crecimiento económico, sin duda este nuevo escenario tendrá impactos. A grandes rasgos, los agentes verán afectada la hoja de balance en el corto plazo. En particular, se estiman impactos heterogéneos según el sector: Están Los mejor posicionados: los que cobran en dólares y tienen mayor parte de su estructura de costos en pesos (transables /exportables). Agro, minería, hidrocarburos y encadenamientos. Están los más afectados: mayor deterioro del salario real y menor acceso al crédito afectan a la demanda y por ende a los ingresos de empresas orientadas al mercado interno. Entre ellos consumo masivo, electrodomésticos, turismo extranjero, textil y calzado. Por último está el sector estrella: la construcción (y sus encadenamientos -minerales no metálicos, metálicas básicas) crecerá, pero menos (debido a menores créditos hipotecarios, menor financiamiento para obra privada y menor gasto en obra pública) aunque frente a esto puede tener más impulso las obras vía PPP (por lo que habrá que monitorear costos/ofertas). Con todo, las previsiones de crecimiento para 2018 se han revisado a la baja ubicándose hoy en torno al 1,7%, con un consumo creciendo algo por debajo del PBI y una inversión que moderaría su ritmo de crecimiento respecto de lo que se esperaba pero que igualmente arrojando un saldo positivo (entre 5 y 7% de expansión) a partir del arrastre que deja el primer semestre y la continuidad de muchos de los proyectos en marcha sobre todo en materia de infraestructura, particularmente energética.

P.: ¿El reajuste cambiario y las medidas tomadas hasta el momento nos garantizan transitar 2018 y 2019 sin posibilidades de un nuevo sobresalto?

D.S.: No debemos olvidarnos que la economía argentina está atravesando un cambio estructural realmente desafiante y la estrategia gradualista permite hacerlo de una manera socialmente aceptable, pero nos obliga a tener la baja guardia frente a cualquier tipo de shock. Para ser claros, el modelo gradualista funciona a la perfección en un contexto de plena estabilidad política y con abundancia de dólares en el mundo. Sin el cumplimiento de algunos de esos requisitos, las tensiones se hacen visibles casi inmediatamente y ahí es cuando recobra vital importancia el manejo de la política económica. La buena noticia es que el gobierno parece haber tomado nota en el asunto y ya está avanzando en la construcción de un programa económico consistente que permita reducir los déficits gemelos sin afectar negativamente y de sobremanera el nivel de actividad en un escenario de encarecimiento del crédito externo por la normalización de la política monetaria de Estados Unidos. Una muestra fiel de ello es la designación de Nicolás Dujovne como nuevo coordinador de toda el área económica del gobierno, una medida que todo el mercado venía reclamando en vistas de algunos problemas de descoordinación que la propia dinámica descentralizada del equipo generaba. Así las cosas, si bien todo parece indicar que el gobierno está haciendo todo lo posible para estar preparado ante cualquier eventualidad, lo cierto es que la ratificación del gradualismo como único camino factible de estabilización (decisión con la cual estamos de acuerdo desde los comienzos de esta gestión) no dejará que estemos totalmente exentos de un nuevo traspié si las cosas se ponen más feas en el exterior. Sencillamente, la respuesta es depende...

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