25 de junio 2018 - 00:00

No tuvimos una fiesta

No tuvimos una fiesta
Lamentamos desilusionar a algunos, pero la recalificación de nuestra plaza de fronteriza a emergente no la hace (no nos hace) ni mejor ni peor -el valor de los activos financieros no está dado ni por la calidad ni por la cantidad de quienes los adquieren, sino por cuestiones intrínsecas como el retorno y el nivel de riesgo que conllevan-.

El viernes comentábamos la excepcionalidad de la recalificación Argentina, la única en la historia de MSCI en que se introducían "condicionantes", y lo acotado de la reacción bursátil del jueves hablamos de un "ajuste", no de suba- que llevó los precios de las acciones a niveles apenas de una semana antes. Lo que nos preocupa aquí no son las razones de las "observaciones" de MSCI, sino sus consecuencias, en particular la decisión que solo se aplica la medida a los títulos argentinos cotizantes en el extranjero. En primer término esto evidencia dos cosas: el fracaso del sistema bursátil Gobierno e instituciones privadas- en generar liquidez y la confusión/ignorancia de los directivos con el volumen. Si bien es cierto que el promedio operado diariamente por papel cotizantes era entre 2000 y enero de 2009 un 22% inferior a los u$s260.853 de la gestión Macri, la velocidad de la rotación del mercado ("share turnover", la medida más habitual de la liquidez de un mercado accionario) promedia 6.68% -en mayo se redujo a 5.54%- apenas mayor al 6.17% entre la calificación como fronterizo y la asunción de Macri, y sensiblemente inferior al 11.23% de 2000 a 2009 cuando éramos emergentes plenos. Otro aspecto que devela esta recategorización condicionada es la irrelevancia de la reforma de la ley de mercado de capitales en la decisión de MSCI claramente no la consideraron gravitante-, un costoso capricho del MinFin en favor de algunos actores locales. Seguimos mañana.

La última rueda de la semana mostró las "patitas cortas" de la euforia del jueves al ceder el Merval 2.13 por ciento para quedar en 30.210,61 puntos. Así en la semana en que pasamos a ser emergentes, algo que según algunos la mayoría del mercado no esperaba, la cartera teórica sumó un magro 0.01%, el Burcap retrocedió 1.38% y el M.Ar ganó 0.35%. El volumen del viernes, $1090 millones (con 31 alzas, 12 sin cambio y 45 bajas). Lo peor: bancos y servicios públicos; lo mejor: las cementeras.

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