9 de julio 2018 - 22:03

Carrió-UCR fisuran interbloque oficial en la Cámara baja

• FURIA PRESIDENCIAL POR NEGOCIACIÓN DEL PRESUPUESTO 2019 EN EL CONGRESO
Macri recibe mañana a los Gobernadores UCR en crisis por “fuego amigo” y acercamiento de Casa Rosada al peronismo “dialoguista”.

Elisa Carrió
Elisa Carrió
Tambalea en Diputados el interbloque de Cambiemos. La guerra abierta entre Elisa Carrió y Alfredo Cornejo hace crujir al colectivo de diputados oficialistas que integran PRO, la UCR y la Coalición Cívica de cara al debate del Presupuesto 2019. La falta de control de Carrió de parte de la Casa Rosada, sumada a la negociación que el Poder Ejecutivo Nacional abrió con el peronismo de los gobernadores dejaron al interbloque de gobierno atado con hilos.

Mañana el Presidente recibirá a los radicales Cornejo, Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes) en la mesa política ampliada junto a Marcos Peña, Rogelio Frigerio, María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta. El gobernador de Mendoza y titular del Comité Nacional UCR, entró en estado de hibernación política desde que desautorizó públicamente la política tarifarias del Presidente y desató la rebelión del peronismo que terminó con el veto presidencial a la ley que retrotraía el precio de los servicios públicos al año pasado. La nueva fractura expuesta entre Cornejo y Carrió complica nuevamente a Cambiemos ahora en medio de las delicadas negociaciones bilaterales con los gobernadores del PJ para blindar la nueva meta de déficit fiscal del 1,3% del PBI para 2019.

En ese contexto, el único radical que salió a bajarle la espuma a la escalada entre Lilita y Cornejo fue el cordobés Mario Negri, titular del interbloque de 108 diputados que padeció otro sacudón interno durante el debate para legalizar el aborto. "Que le quede claro a todo Cambiemos. La próxima, rompo", fue la advertencia de Carrió aquel día en el recinto luego de la aprobación del proyecto. Cornejo mandó a iluminar todas las sedes de los Comités UCR de verde para apoyar la conversión en ley de la iniciativa que ahora se votará en el Senado.

"La diputada @elisacarrio realizó una broma -ella misma lo reconoció-, que lamentablemente hirió la sensibilidad de la UCR. Ella sabe más que nadie que sin la UCR no existiría Cambiemos", sostuvo Negri en su cuenta de la red social Twitter. Y agregó: "En un contexto difícil para el país, debemos cuidar #Cambiemos. La sociedad nos lo agradecerá". La legisladora por la Ciudad había asegurado que los radicales son "migósinos" y que ella los "maneja desde afuera", a lo que la UCR contestó con un pedido de "respeto" y acusándola de hacer "stand up".

Pero más allá de la mediación de Negri, los "caciques" de la UCR con peso territorial como Cornejo (Mendoza), Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes) se sienten aislados en Cambiemos. Por un lado, el fuego "amigo" de Carrió a través del destrato público de la diputada. Del otro, Macri amaga con un acercamiento con el peronismo "dialoguista" de Miguel Pichetto y los gobernadores que complica el armado de listas para el radicalismo en las provincias.

El fin de semana ardió el chat de WhatsApp que animan unos 150 dirigentes radicales con cargos en el Gobierno. Allí hicieron catarsis contra Carrió desde el Ministro de Salud, Adolfo Rubinstein, pasando por Jesús Rodríguez y Lila Puig de Stubrin. Es que además Macri inició, a través de Rogelio Frigerio, una nueva ronda de bilaterales con los gobernadores peronistas para negociar la obra pública en medio del programa de ajuste de gasto acordado con el Fondo Monetario Internacional que deberá ser aprobado en el Presupuesto 2019. Las fotos incomodan al radicalismo que todavía tiene pendiente el cierre de candidaturas y listas en las provincias en medio de un eventual pacto de no agresión entre la Casa Rosada y los mandatarios PJ.

El fin de semana, Horacio Rodríguez Larreta salió a expresar la doctrina del macrismo para superar esta crisis interna entre lilitos y radicales. "Siempre preferiríamos que no haya diferencias, pero es una coalición, no todos pensamos igual, tenemos orígenes diferentes", planteó el jefe de gobierno porteño. Es decir, apuestan a que la espuma política baje sola.

"Llevamos tres años de convivencia conjunta, las relaciones están muy fortalecidas. Cada tanto pasan cosas como éstas, pero es natural", agregó Rodríguez Larreta.

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