26 de mayo 2016 - 00:00

España, modelo para no copiar

España, modelo para no copiar
 Hace unas semanas, el presidente de la Liga de Fútbol Profesional de España (LFP), Javier Tebas, vino a la Argentina a exponer las bondades del formato del fútbol español, tomada por algunos dirigentes como parámetro para la meneada Superliga. A principios de mayo, en la Bolsa de Madrid, aclaró que los ingresos en la Liga Española durante la última temporada rondaron los 2600 millones de euros y que redujo casi 82 millones la deuda de 327 millones que conserva con el Estado, aunque sigue habiendo un déficit de 1.820 millones.

Tras seis años de descenso de la deuda bruta del total de los equipos que conforman la primera y la segunda división del fútbol español, en los últimos tres años se invirtió la tendencia. Luego de una baja en la temporada 2013/2014 respecto de la anterior, en el 2014/2015 subió 157.394.129,75 de euros. De ese total, Real Madrid, Barcelona y Atlético Madrid acumulan casi la mitad de la deuda total y los seis más endeudados, el 70 por ciento. Cabe aclarar que esos grandes cubren este agujero con los ingresos por TV, que rondan los 150 millones de euros.

En cambio, clubes como Espanyol y Real Zaragoza tienen una deuda bruta muy superior a sus ingresos, que en el rubro de la TV apenas llega a los 40 millones de euros. En el caso de Espanyol, la deuda se sitúa en torno de los 191 millones de euros, siendo la quinta más alta del fútbol español por detrás del Real Madrid, Barcelona, Atlético Madrid y Valencia. Por su parte, Zaragoza, que milita en la Segunda División, es el séptimo equipo con mayor deuda bruta. A la hora de escarbar en las causas, alcanzar objetivos demasiado alejados o verse en inferioridad respecto de rivales directos los lleva a alcanzar esos niveles de endeudamiento.

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