Ubicado estratégicamente, Añelo se transformó también en un imán para inversores de real estate. Emiliano Mossotti, abogado, empresario y desarrollador inmobiliario, contó su experiencia en la ciudad y repasó algunos de sus proyectos.
Emiliano Mossotti: "Los inversores confían cada vez más en Vaca Muerta"
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Emiliano Mossotti, abogado, empresario y desarrollador inmobiliario.
“Me parece importante contextualizar. Uno hace más de 10 años que va a la zona y se enamora de la ciudad, porque el potencial es enorme. Hay tres momentos que marcan el crecimiento de Añelo. Cuando llegamos, entre 2012 y 2016, donde hubo un gran desarrollo industrial, que generó que se instalen más de 350 empresas en el parque industrial municipal, que legitimó un poco que Vaca Muerta es una realidad y que sin lugar a dudas es una de las matrices productivas de Argentina”, explicó.
Y continuó: “Eso generó un segundo estadío: que esa cantidad de empresas de todo el mundo tenían un gran tráfico de personas, necesitaban lugar para dormir y generó un desarrollo inmobiliario: se necesitaban lugares para alojar a los trabajadores. Así comenzó el momento en el que los desarrolladores fueron a armar sus hoteles o complejos en la ciudad. Y hace un año y medio, se vive un tercer estadío. Que es donde ya no solo se necesitan camas, sino también un Añelo con más servicios, más infraestructura, para poder recibir a toda la gente. Porque cada vez es mayor el tráfico”.
En ese escenario, habló acerca del proyecto Alamos Añelo: “Estamos desarrollando un producto, que son casas, que en una primera etapa contempla 60 viviendas, de las cuales 30 se entregarán en enero y las otras 30 para marzo. La segunda etapa del desarrollo va a constar de un condominio y la tercera etapa, estamos tratando de buscar la vuelta comercial para darle el soporte y el servicio para lo que Añelo necesita”.
“De las primeras 60 casas están todas vendidas a inversores particulares. Y ya logramos generar los preacuerdos con las petroleras para lograr el alquiler sobre esas 60 viviendas”, agregó Mossotti, quien detalló:
“En Alamos tenemos un sistema constructivo que son casas de estructura metálica, que una gran parte se desarrolla en Santa Fe y luego, con mano de obra local, terminamos el montaje y la finalización de la vivienda. Apostando al crecimiento de la zona y que haya cada vez más mano de obra local”.
Al referirse justamente al estilo constructivo de las casas, Mossotti señaló: “Hay algunas particularidades, que la zona por cuestiones puntuales requiere. A veces, la inmediatez es un factor fundamental. Porque la demanda es tan rápida, que la construcción tradicional tiene tiempos que no alcanzan para cubrir las necesidades”.
Sobre la llegada de inversores a Añelo, Mossotti sostuvo: “En su momento, en 2012, fui a ver qué era Vaca Muerta. Y desde ese momento no paré un segundo de viajar constantemente. Y el desafío que hay ahora es cómo seducimos y cómo atraemos al inversor. El inversor piensa que su inversor va a estar mejor resguardada afuera, o en el exterior, y no se da cuenta que Añelo convalida mucho más de lo que está invirtiendo afuera. Añelo es una realidad y la prueba está en que todos los desarrollos que se están haciendo están fondeados, porque los inversores confían cada vez más en Vaca Muerta”.
Y, de cara al futuro, proyectó: “Imagino que en los próximos diez años Añelo va a tener más de 70.000 personas viviendo. Y el desafío como desarrollador es poder darle la posibilidad y brindar los medios a aquellas familias que se quieran venir a instalar”.
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