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“América Latina está viviendo un retroceso en materia de DD.HH.”
• ENTREVISTA A ERIKA GUEVARA-ROSAS, DIRECTORA REGIONAL DE AMNISTÍA INTERNACIONAL
En diálogo con este diario, condenó la represión de reclamos sociales en Brasil y la institucionalización de la estrategia militar contra el narcotráfico en México. Hubo, además, un llamado de atención a los gobiernos por su falta de cooperación ante la crisis de desplazados venezolanos.
El año pasado fue el más violento en las últimas dos décadas para México, país donde el Congreso votó, en diciembre pasado, la institucionalización de la participación de las fuerzas armadas en la lucha contra el narcotráfico pese a la oposición de activistas y organizaciones de derechos humanos que responsabilizan a los militares de graves violaciones a derechos fundamentales. En ese marco, en julio los mexicanos acudirán a las urnas a elegir al sucesor de Enrique Peña Nieto.
"Lamentablemente lo que vimos de los diferentes candidatos es que ninguno está presentando soluciones que atiendan a la grave crisis. No hay una fórmula mágica que vaya a resolver de manera integral los grandes retos en materia de derechos humanos que tiene le pais, pero lo que nos queda claro es que primero hay que sacar a los militares de las calles y devolverlos a los cuarteles", aseguró Guevara-Rosas.
En opinión de Amnistía Internacional, la llamada guerra contra las drogas, la estrategia iniciada en 2006 por Felipe Calderón, debe ser reemplazada por una perspectiva de seguridad policial. "Los cuerpos municipales y estaduales deben ser fortalecidos en entrenamiento y capacitación. Se tiene que hacer una limpieza en el tema de corrupción, ya fue evidenciada la grave colusión que existe de las fuerzas de seguridad con el crimen organizado", detalló.
"Pero yendo a la raíz de los problemas que enfrenta el país, las próxima administración debe centrarse específicamente en desarrollar programas e inversiones para garantizar los derechos económicos y socioculturales de la mayoría de la población. Cuando uno analiza el fenómeno del crimen organizado y su creciente poder territorial, ve que ocurre en poblaciones que fueron históricamente marginalizadas", explicó.
Venezuela
"Hoy día nos encontramos con esta crisis que, podríamos decir, es nueva porque efectivamente la salida de venezolanos empezó hace ya algunos años pero estas salidas masivas en búsqueda de protección son nuevas para la región", afirmó la directora para las Américas de AI consultada sobre los movimientos de ciudadanos venezolanos por Sudamérica que, según ONG, tiene el potencial de convertirse en una crisis de desplazados al estilo de las de Medio Oriente.
"En algunos países de acogida, como Argentina, se buscaron mecanismos de regularización a la población que ingresó al país. En otros como Perú, Chile, Brasil y Colombia, están aumentado el número de población venezolana que llega y, en algunos casos, aumenta el número de solicitudes de asilo", indicó y subrayó que "la realidad es que tenemos un marco regional legal que amplía la definición de refugiado contenido en la convención internacional y que llama a los Estados a una obligación mayor de proteger a estos desplazamientos forzados, precisamente porque estas personas no pueden retomar a un país que está violentando gravemente los derechos humanos".
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