23 de julio 2019 - 00:00

Cristina pide elevación a juicio oral en "cuadernos"

Con críticas a Bonadio por su investigación y como atajo a un "tribunal imparcial", expresidenta no cuestionó que el caso pase a debate oral.

Cristina Fernández de Kirchner
Cristina Fernández de Kirchner

La expresidenta Cristina de Kirchner pidió ir a juicio oral en la causa de los cuadernos, para ser juzgada por un tribunal imparcial que “repare todas las ilicitudes” que a su criterio cometió el juez Claudio Bonadio a lo largo de la instrucción del caso. En un escrito presentado ante el juez, aceptó ir a debate oral al considerar que es imprescindible que un tribunal imparcial la juzgue y restablezca los principios constitucionales del debido proceso.

Se trata de una presentación formal en respuesta al pedido de elevación a juicio efectuado por el fiscal Carlos Stornelli. Varios acusados ya se han opuesto al juicio al pedir sus sobreseimientos. Pero la actual senadora prefirió como estrategia que el caso pase rápidamente a la órbita de un tribunal oral.

“En condiciones normales, la posibilidad de que estas actuaciones pudieran ser elevadas a juicio, en términos jurídicos, resultaría absurda. Ello así, pues todo lo actuado es insanablemente nulo, al haberse vulnerado todas y cada una de las garantías previstas en la Constitución nacional”, es la introducción de un escrito en el que Cristina explicó por qué prefiere ir a juicio. La presentación, que lleva la firma del abogado Carlos Beraldi, ratifica que el caso comenzó con un elemento de prueba “ilegal”, los cuadernos del chofer Oscar Centeno, de los que hay sólo fotocopias, con una clara maniobra de forum shopping, para “retener” la causa sin enviarla a sorteo como hubiera correspondido. “Los supuestos cuadernos nunca aparecieron y sólo obra en la causa lo que serían fotocopias de los mismos”, dijo. “Insólitamente, el juez y el fiscal habrían tenido noticias de estos supuestos cuadernos desde el mes de marzo del año 2018 y pese a tratarse de una prueba básica, recién fueron a buscarla cinco meses más tarde -junto con Oscar Centeno-, cuando el proceso había tomado estado público”, ratificó Beraldi. “En esta oportunidad, Centeno habría confesado que incineró los supuestos cuadernos en la parrilla de su casa, no obstante lo cual pasó a ser considerado por los instructores como un importante colaborador en la búsqueda de la verdad”, consignó el escrito.

La exmandataria denunció “detenciones arbitrarias a mansalva” por parte del juez, y una aplicación irregular de la figura del arrepentido. “Lógicamente, en un pícaro intento por no dejar rastros de estos atropellos, de manera deliberada se omitió obtener registros audiovisuales de estos actos procesales, vulnerando la clara disposición prevista en el art. 6 de la Ley 27.304. Pero como la mentira tiene patas cortas, quedó expuesto públicamente que las actas que documentaron las supuestas declaraciones de los arrepentidos no eran un fiel reflejo de las mismas”, se defendió. Luego de la feria se espera que haya una elevación a juicio del primer tramo de la causa.

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