En Wall Street, si bien hubo datos económicos contradictorios, fue un informe de la calificadora Moodys sobre la nota de EE.UU. el que generó al cierre una corriente vendedora. Ocurrió después de que la Bolsa operó con ganancias en casi toda la sesión. ¿Qué está pasando? Es que la principal potencia económica muestra números cada vez menos solventes sobre su situación financiera. Un alto endeudamiento, un déficit fiscal récord y mayores urgencias de caja a futuro le restan credibilidad. Ya una calificadora china había castigado a Estados Unidos por este motivo, aunque quizás ello haya sido una suerte de represalia. Lo que es evidente es que EE.UU. ya no es lo que era. (Ver más inf. en pág. 5.)
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