La señal TN del monopolio Clarín transmitió ayer en directo desde Puerto Argentino la lectura de una carta de un funcionario kelper dirigida a Cristina de Kirchner, en la que le reclamó que la Argentina reconozca el resultado del referendo de Malvinas. Es legítimo que estos kelpers exageren en el afán proselitista de defender la posición británica. No es entendible que el monopolio Clarín se sume a esa campaña y le otorgue aire al vocero de un pequeño grupo de personas de un referendo que, como tituló este diario en su portada ayer, no fue más que una «reunión de consorcio kelper». Precisamente, esa etiqueta o «hashtag», la «reunión de consorcio kelper», se convirtió rápidamente en uno de los temas dominantes en redes sociales. Sobran temas que merecen más aire y sobran grupos más representativos que el de los 1.517 kelpers.
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