Tiempo de calma tras la tormenta

El tiempo siempre es un aliado para analizar los efectos de una medida. En el caso del turismo y del reciente incremento del recargo a los viajes al exterior, si bien todavía las aguas están revueltas, ya es posible aventurar los tiempos por venir. Con el correr de los días los operadores del sector fueron adaptando los precios a la alícuota del 35% que rige actualmente y los clientes se fueron adecuando a la nueva realidad.

La primera conclusión que se tiene es que todo fluye de manera armónica. No hay histerias ni de un lado ni del otro. Esto tiene una explicación. Como en el ambiente bursátil se suele decir que el mercado "descuenta" una futura decisión económica, en este caso se podría hacer un paralelismo y concluir que los consumidores se adelantaron al recargo y compraron pasajes, paquetes y servicios por anticipado.

Por este motivo, en las agencias viven por estos días una lógica calma después de tantas semanas de actividad. El fenómeno del pago en cuotas en pesos y las agresivas promociones que se conocieron en los últimos tiempos hicieron que mucha gente comprara sus próximas vacaciones con fechas que llegaban hasta noviembre próximo. Los destinos al exterior típicos que eligen los argentinos para el verano tienen sus plazas agotadas y un panorama similar se presenta para mediados de 2014, cuando Europa y Estados Unidos ingresan en su período más caliente.

Ante esta situación, coinciden en las agencias de turismo, es lógico que la demanda ceda durante algún tiempo, pero no por el impacto del 35% de recargo, sino por este consumo previo. Una vez reacomodadas las piezas se cree que todo volverá a la normalidad y el nivel de actividad se irá recuperando. Todo indica, de acuerdo con la opinión de los operadores consultados, que este sobrecosto no desalentará a los viajeros. Las razones son variadas. Hay cuestiones emocionales y otras económicas. En las primeras, está claro que quien disfruta de realizar viajes al exterior difícilmente se contente con algún destino nacional, especialmente si de playas se trata. Es un tema de gustos. En cuanto a lo económico, habría que esperar algunos meses para ver cómo impacta el 35% en el bolsillo de la gente. Variables como la devaluación del tipo de cambio oficial y el aumento de los precios internos pueden neutralizar el recargo para los viajes al exterior. Todo está por verse. Debido a la importancia que tiene el tema, en esta edición de Ámbito del Placer se ofrece un informe completo sobre cómo queda el escenario después de la aplicación del recargo al turismo al exterior. También cómo es el trámite para recuperar lo abonado en concepto de anticipo del Impuesto a las Ganancias. Un servicio para todos los lectores.