12 de julio 2019 - 00:00

El amor detrás del amor

Esta ópera prima de Héctor Díaz en la dramaturgia desmantela el engranaje del mundillo artístico que tan bien conoce el autor, en este caso vinculado con el cine. La estructura del relato dentro del relato en clave de comedia cuenta la historia de un guionista cuarentón que triunfó hace años y quedó como un remanente desangelado a quien un productor, hábil y desesperado por un éxito, encuentra en una youtuber la compañera ideal para la escritura.

Juntos deberán pergeñar una historia que atraiga al funcionario de turno, quien hará entrar, o no, ese guión al concurso para ganar subsidios. El quinto personaje es la secretaria del productor, una criatura frágil, tan enamorada de su jefe que parece enceguecida y se muestra más hábil para desplegar sus armas de seducción en lo laboral que en lo amoroso. Atrae esta estructura del relato dentro del relato en el que los guionistas no hacen más que ficcionar la realidad de esos tres personajes, que a su vez se entusiasman al descubrir que sus vidas grises con sus conflictos terrenales pueden servir como material para un guión.

La puesta a la manera de la pantalla partida exhibe dos ambientes en donde transcurren las escenas en paralelo, la oficina del productor y el departamento donde los guionistas escriben. La habilidad consiste en hacer perder al espectador la noción de qué es la realidad y qué es la fantasía guionada, en tanto se tensan al máximo todos conflictos para dejar a los cinco personajes al borde del estallido. Eso redunda en un interés que nunca se pierde, justamente porque hay intriga, por un lado, y arco dramático en los personajes, por el otro.

El desenlace, sumamente creativo, obedece a la lógica del final abierto, con una invitación al espectador a quedarse con el final que más guste, y no por pereza de un autor que lo deja abierto sino todo lo contrario, por las múltiples opciones que ofrece.

La obra cuenta con excelentes actuaciones y los conflictos planteados van desde el amor no correspondido o el poder a cuestiones generacionales entre el guionista y la youtuber, llena de tics nerviosos, ensimismada en su pantalla pero más despierta y pragmática de lo que el cuarentón titubeante podría esperar. Barre con los prejuicios hacia ambas direcciones, y hasta convierte ese trabajo de escribir a cuatro manos y esa convivencia improbable en un vínculo entrañable donde hasta puede haber amor, y tal vez, sea por fuera de la película.

“Amor de película”. De y dir: H. Díaz. Int.: G. Chendo, R. De la Torre, J. Niklison, M. Inés Sancerni, L. Torn. Espacio Callejón. Jueves 21 hs.

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