Independiente ganó con lo justo en el debut de Beccacece

Ganó 1-0 con gol de Pablo Hernández y deberá ir a Ecuador a defender, mantener o ampliar ese triunfo para.clasificar a cuartos, donde espera Independiente del Valle.

Independiente venció a Universidad Católica de Ecuador y se acerca a los cuartos de final.
Independiente venció a Universidad Católica de Ecuador y se acerca a los cuartos de final.
NA

Independiente derrotó por 1-0 al ecuatoriano Universidad Católica, en un partido de ida por los octavos de final de la Copa Sudamericana, jugado este jueves en el estadio Libertadores de América, en Avellaneda.

Pablo Hernández anotó el 1-0 para el dueño de casa, amplios dominadores en el juego, pero con un resultado exiguo en cuanto a merecimientos.

El encuentro desquite se jugará el 1 de agosto en la altura de Quito (2.850 metros sobre el nivel del mar), y allí Universidad Católica necesitará ganar por dos goles de distancia para revertir la llave, mientras que el Rojo avanzará con un empate o una caída por un gol, si es que logra anotar un tanto o más fuera de su casa.

En los cuartos de final ya espera otro ecuatoriano, Independiente del Valle, que viene de eliminar al venezolano Caracas (0-0 y 2-0).

En una noche de muchísimo frío y lluvia inclemente en Avellaneda, era Independiente el que tenía la mayor responsabilidad, un poco por su condición de equipo más experimentado en este tipo de duelos, otro tanto por la localía, y también por la necesidad de conseguir un triunfo con margen para acudir más tranquilo al desquite en la altura.

Lo atosigó Independiente en los primeros minutos en varias jugadas de balón parado, pero resistió como pudo la Universidad Católica, con algunos despejes de última hora y la seguridad del arquero Galíndez.

No tardó en tomar el control el conjunto local, al capturar la posesión del balón con un planteo dinámico, un equipo corto -en cuanto a su distribución- en pocos metros, lo que le permitió tener superioridad numérica en varios sectores, mientras que el conjunto ecuatoriano no conseguía salir del asedio.

Lejos de los antecedentes que traía, el equipo ecuatoriano se vio forzado a replegarse, mientras el Rojo buscaba con insistencia por arriba, y así estuvo cerca con un cabezazo apenas alto de Figal, además de generar inquietud con la velocidad de Pizzini sobre el carril derecho.

Cecilio Domínguez estuvo a nada de darle el primero al equipo argentino con un toque suave que dio en el travesaño y picó afuera, el paraguayo tomó el rebote y disparó nuevamente, pero Galíndez se recompuso para salvar el arco visitante con una estirada milagrosa.

En toda la primera parte, la única aproximación de los ecuatorianos fue un tiro libre que Facundo Martínez pateó muy arriba desde buena posición.

En la necesidad de claridad en los ataques no colaboraba tampoco el campo de juego castigado por la lluvia, con errores en los detalles a la hora de definir, aunque Independiente se mostraba mucho mejor adaptado a esas condiciones.

Mantuvo la ambición Independiente en el arranque de la segunda parte, y avisó con un tiro libre desde ángulo cerrado de Martín Benítez que se fue apenas alto, y casi enseguida llegó la apertura, en un buen pase de Sánchez Miño al vacío, Domínguez entró por izquierda, eludió a Galíndez y envió el centro para que Pablo Hernández conectara de cabeza ante el arco vacío.

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Con un fútbol dinámico y buenas sociedades (Pizzini y Bustos por la derecha, Sánchez Miño y Domínguez por la izquierda), Independiente generó algunas ocasiones más para mejorar su renta, como un remate potente de Benítez y un cabezazo de Figal, ambos contenidos con solvencia por Galíndez.

Ya en la recta final, otra vez el arquero visitante debió intervenir ante una gran jugada individual del ingresado Silvio Romero, y en el tercer minuto de descuento Pizzini remató de zurda, pero la pelota rozó el poste derecho y salió.

El resultado fue muy corto para un Independiente que mostró un juego promisorio, pero que careció de pólvora para llevarse un éxito más abultado, por lo que deberá cuidarse en la altura contra una Universidad Católica que mostró muy poco en Avellaneda e intentará torcer el curso de la serie en el estadio Olímpico Atahualpa de Quito.

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