17:40 hs: TRES MESES DE PRISIÓN EN SUSPENSO PARA DOCENTE POR PROTESTA

17:40 hs: TRES MESES DE PRISIÓN EN SUSPENSO PARA DOCENTE POR PROTESTA
Consideró el juez federal de Bariloche, Leónidas Moldes, que la maestra Marina Schifrin es responsable del corte de ruta del 21 de marzo de 1997. La medida de fuerza se había realizado en protesta por un recorte salarial a los docentes rionegrinos y en defensa de la educación pública.

El juez federal de Bariloche, Leónidas Moldes impuso una pena de tres meses de prisión en suspenso para la maestra Marina Schifrin, a quien consideró responsable del corte de ruta del 21 de marzo de 1997, realizado en protesta por un recorte salarial a los docentes rionegrinos y en defensa de la educación pública. Además de la sanción, Moldes prohibió a Schifrin concurrir a "concentraciones de personas en vías públicas de comunicación interjurisdiccionales en momentos en que se reúnan más de diez personas".

En su fallo el juez consignó también que no reguló los honorarios del defensor de Schifrin, Raúl Prytula, debido a que el abogado "no ha cumplido con sus deberes previsionales y fiscales". La condena se relaciona con una protesta que se planteó en dos momentos. Primero, con un corte de la ruta 237 en el acceso a Bariloche, frente a la terminal de ómnibus, y el otro sobre el puente del río Ñireco, ya en el casco céntrico de la ciudad.

En las consideraciones del fallo Moldes aludió a los intentos de varios vecinos y comerciantes de Bariloche que pedían a los manifestantes cruzar el piquete. También se refirió a turistas nacionales y extranjeros que debían atravesar el piquete a pie con sus equipajes en la mano para abordar colectivos y aviones para regresar a sus lugares de origen. Por ello el juez interpretó que la protesta incurrió en el delito consignado en los artículos 26, 27 bis, 29, 45 y 194 del Código Penal, y dijo que Schifrin fue responsable de "impedir y entorpecer el normal funcionamiento de los medios de transporte por tierra y aire sin crear una situación de peligro común".

 Al término de la lectura de la sentencia, la docente condenada se dirigió a una concentración de unas 300 personas en la puerta del juzgado y, micrófono en mano, arengó a los manifestantes a entonar cánticos e insultos contra Moldes, como así también a imitar a los piqueteros en los cortes de ruta. En diálogo con los periodistas Schifrin anticipó que apelará el fallo ante la Cámara de Casación Penal de Buenos Aires, consideró que Moldes es un "juez en connivencia con el poder político" y apreció que "la lucha tiene que continuar".