"Acepto porque es algo que yo le debo al país"

«Aceptar es algo que yo le debo al país. El país conmigo ha sido generoso. He podido estudiar, he podido hacer mi vida, he tenido una carrera judicial bastante larga.» De esta forma, la penalista Carmen Argibay convalidó su postulación a la Corte Suprema de Justicia.

Desde Holanda, la actual integrante del Tribunal Penal Internacional dijo que durante una reunión que mantuvo con Néstor Kirchner en Casa de Gobierno, el jefe de Estado le habló sobre la forma en que quiere integrar la Corte Suprema de Justicia y le aseguró que no desea un tribunal «adicto».

«Creo que si en este momento me ofrecen un cargo de semejante envergadura y yo creo que se puede hacer algo por el país desde ese cargo, pienso que también es una obligación como ciudadana colaborar para eso. Si podré hacerlo o no, se verá», enfatizó la jurista.

«Hay una cuestión para mí que es de principios: los tres poderes tienen cada uno su función. En el momento en que uno de los poderes a través de alguno de sus funcionarios o representantes permite la injerencia de otro poder en tareas que no le corresponden, el Estado de derecho se va al diablo», subrayó.

Además, abundó: «Si yo le permito al Presidente o a un legislador que me diga lo que tengo que hacer en un juicio, la Justicia no está siendo un poder independiente».

La penalista advirtió que el prestigio de la Corte se hace con el trabajo, no solamente con un nombre.