Allanan galpones de trenes buscando causas de choque

José Pedraza

La Justicia Federal allanó dos galpones de la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA) e inmovilizó las dos formaciones que hace una semana protagonizaron un choque en el barrio de Palermo, que arrojó 134 pasajeros heridos, confirmaron ayer fuentes judiciales.

El accidente desnudó una interna entre la Unión Ferroviaria -que encabeza José Pedraza-y el nuevo concesionario de TBA, Sergio Taselli, y que también aspira a quedarse con el Metropolitano. En realidad, se trata de una pelea por el control de los servicios ferroviarios.

Cuando se produjo el choque, los gremialistas sostuvieron que no se cumplían las condiciones mínimas de seguridad y responsabilizaron -por esa vía-al vapuleado secretario de Transporte, Ricardo Jaime. Mientras tanto, la causa está en los estrados judiciales y siguen su curso bajo el atento seguimiento de las partes enfrentadas.

Los procedimientos fueron ordenados por el juez federal Julián Ercolini, quien determinó que los trenes, que se encontraban en dos galpones de las localidades bonaerenses de Victoria y José León Suárez, no puedan ser movilizados, puesto que en los próximos días se realizará un peritaje sobre la formación.

El estudio será realizado la semana próxima por un ingeniero ferroviario que intentará determinar a qué altura de las vías empezó a frenar la formación que colisionó con la que se encontraba detenida.

Ese estudio se sumará a los peritajes que realizó la Policía Federal inmediatamente después del choque producido el jueves de la semana pasada, con un saldo de 134 heridos. Las fuentes consultas adelantaron que el juez dispondrá la realización de un estudio « técnico operativo» sobre el sistema de señales que se encuentra sobre las vías para intentar corroborar si éste funcionaba correctamente al momento de la colisión.

El viernes último, el juez Ercolini allanó las oficinas de TBA en el barrio porteño de Retiro y secuestró grabaciones en las que se registraron las conversaciones que, a través de intercomunicadores, sostuvieron el maquinista del tren que provocó el choque y el señalero que estaba en ese momento a cargo de las operaciones.

La empresa TBA reiteró que el sistema de señales «estaba funcionando correctamente» antes del accidente, y sostuvo que el conductor de uno de los convoyes no respetó esas señales.

El choque se produjo entre dos formaciones de la línea Mitre que marchaban en el mismo sentido cuando un tren que iba desde la terminal de Retiro hacia José León Suárez embistió a otro que iba en el mismo sentido, pero que estaba detenido, aguardando que se produjera el cambio de señal.

Dos maquinistas que pasaron apenas diez minutos antes por el lugar en donde se produjo el accidente de trenes de la línea Mitre afirmaron al declarar ante el juez que la señalización «funcionaba bien».

El magistrado no citará al maquinista de la formación que protagonizó el choque hasta tanto tenga elementos de peso en la causa que podrían determinar que sea imputado del presunto delito de «estrago culposo».