El actor mexicano que brilló en una de las telenovelas más famosas de Televisa, ganó mucho dinero y ahora está en ruina: necesita trabajar a sus 84 años

Malas decisiones financieras y personales llevaron a este artista a terminar en bancarrota. Descubre quién es en esta nota.

De estrella de Televisa a estar en la ruina con 84 años.

Carlos Bonavides, uno de los rostros más emblemáticos de la televisión mexicana, atraviesa hoy una etapa difícil a sus 84 años de edad. El actor, recordado por su papel de Huicho Domínguez en la exitosa telenovela El Premio Mayor, confesó que tras haber ganado una fortuna durante su época de mayor fama, actualmente vive en condiciones modestas y busca trabajo para salir adelante.

En su mejor momento, Bonavides compartió créditos con Diego Luna y con la cantante y actriz Laura León, “La Tesorito”, en una producción que marcó a toda una generación y que lo convirtió en un personaje entrañable de la pantalla chica.

Sin embargo, las malas decisiones financieras y personales lo llevaron a perder todo lo que había acumulado a lo largo de más de dos décadas de carrera.

Carlos Bonavides necesita trabajar a sus 84 años

“Vendí mi casa, dos camionetas, un terreno... y nos quedamos verdaderamente en la inopia. Ahora rento un departamento y vivo muy modestamente. Todo mi patrimonio de 26 años, desde Huicho Domínguez para acá, se gastó”, declaró en entrevista en 2024, cuando reveló públicamente la magnitud de su crisis económica.

El actor reconoció que su vida estuvo marcada también por excesos, principalmente el alcohol, así como por conflictos personales derivados del reconocimiento tardío de algunos de sus hijos. No obstante, asegura que ha tratado de enmendar esas ausencias y retomar un rumbo más estable.

Hoy, lejos de las glorias televisivas que lo llevaron al estrellato, Bonavides mantiene firme la esperanza de regresar a los escenarios. Su llamado es claro: quiere y necesita seguir trabajando, ya sea en televisión, teatro o cualquier otro proyecto que le permita recuperar la estabilidad económica que perdió tras haberlo tenido todo.