El actor nacido en Puebla que hizo reír a millones de mexicanos en Televisa pero murió en la ruina: sufrió maltrato durante los rodajes y partió con una deuda millonaria

Conoce la historia de Sammy Pérez, el actor que brilló junto a Eugenio Derbez pero tuvo un triste final.

Sammy Pérez brilló en programas de Televisa

El fallecimiento en 2021 de Sammy Pérez, actor y comediante originario de Pantepec, Puebla, dejó al descubierto una historia marcada por contrastes: el humorista que conquistó la pantalla con su estilo inconfundible y logró gran popularidad en la televisión mexicana, terminó sus días en la ruina económica, enfrentando deudas hospitalarias millonarias y rodeado de polémicas sobre su trato en los foros de grabación.

Sammy alcanzó la fama nacional gracias a sus participaciones en programas de Eugenio Derbez como XHDRBZ y Derbez en Cuando en Televisa, donde protagonizó sketches memorables junto a Abraham Esqueda “Furcio”. También tuvo presencia en el cine, con su aparición en No se aceptan devoluciones, cinta que lo acercó a nuevas generaciones de espectadores. Sin embargo, detrás de las risas, el actor poblano enfrentaba una realidad complicada en lo personal y en lo económico.

Tras contraer COVID-19, Sammy fue hospitalizado de urgencia, lo que generó gastos médicos que su familia y representante no pudieron solventar con facilidad. De acuerdo con su mánager, Erick de Paz, los costos diarios de hospitalización rondaban los 80 mil pesos debido a la intubación y medicamentos, lo que rápidamente elevó la deuda a cerca de un millón de pesos.

¿Eugenio Derbez maltrataba a Sammy Pérez?

A la par de su enfermedad, resurgieron acusaciones sobre presunto maltrato laboral. En redes sociales y entrevistas, excompañeros como “Furcio” señalaron que durante los rodajes con Derbez, Sammy habría sido mantenido encerrado en camerinos durante largas jornadas hasta que concluyeran sus llamados, lo que abrió un debate sobre si su participación en los proyectos respondía a una inclusión genuina o a una dinámica de explotación disfrazada de comedia.

El caso de Sammy Pérez refleja la fragilidad con la que muchos comediantes y actores atraviesan la industria del entretenimiento en México: mientras gozan de fama y cariño del público, carecen de estabilidad económica y protección laboral. Así, el actor que alguna vez hizo reír a millones de mexicanos partió con una deuda millonaria, dejando tras de sí no solo recuerdos entrañables en la televisión, sino también una discusión sobre la dignidad y el trato que reciben los artistas más vulnerables.