30 de mayo 2007 - 00:00

Aborto divide a los K en Santa Fe

Agustín Rossi
Agustín Rossi
Tanto insistió el kirchnerismo en el Congreso con la despenalización del aborto, treta con la que buscó impulsar la candidatura de Ginés González García, que el tema generó ayer un fuerte cruce entre legisladores leales a la Casa Rosada.

Fue la senadora nacional por Santa Fe, y candidata kirchnerista a la gobernación, Roxana Latorre, quien salió a cruzar al también oficialista y candidato santafesino Agustín Rossi, al acusarlo de «abortista» por haber impulsado la presentación de un proyecto de ley que apunta a ampliar los casos de despenalización en la interrupción de embarazos.

Latorre, que responde al liderazgo de Carlos Reutemann en Santa Fe, criticó la iniciativa para despenalizar el aborto, presentada ante el Congreso de la Nación por organizaciones civiles y personalidades de los ámbitos político, artístico e intelectual. «Estoy en contra del abuso indiscriminado del aborto propagado por dicha campaña», pero se mostró a favor del aborto terapéutico contemplado en el artículo 86 del Código Penal.

En el caso específico de Santa Fe, «tanto desde el socialismo con Hermes Binner como el oficialismo con Agustín Rossi tienen posturas pro abortistas; es más, su candidato a la intendencia de Rosario, Juan Silvestre Begnis, se ha declarado públicamente a favor del aborto. Yo, como autora de la Ley de Procreación Responsable, estoy en contra del aborto y a favor del aborto terapéutico», remató la senadora kirchnerista.

La polémica se inscribe en el marco de la interna santafesina por la gobernación, ya que todos los candidatos kirchneristas se disputan el apoyo de Néstor Kirchner, aunque el Presidente haya optado una vez más por la neutralidad para salir airoso en el caso de que el socialista Binner, o cualquiera de sus postulantes, se consagre ganador en los comicios de Santa Fe del 2 de setiembre, donde también se presenta el oficialista Rafael Bielsa.

Los proyectos de ley para ampliar y regular la despenalización del aborto habían sido empleados por el oficialismo como una chicana para presionar al Episcopado de Jorge Bergoglio, a quien desde la Casa Rosada señalan como el jefe oculto de la oposición. Sin embargo, ni Néstor ni Cristina Kirchner se reconocen como « abortistas», y en ese sentido, se entiende la maniobra de Latorre para intentar volcar la simpatía del matrimonio presidencial a su favor.

En plena campaña, Rossi, jefe de la bancada del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados, recorrió durante el fin de semana localidades del Departamento Garay, donde expuso su propuesta para las producciones regionales.

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