6 de julio 2007 - 00:00

Se reúne el peronismo anti-K en San Luis para obligar a Cristina a la segunda vuelta

Cristina Fernández de Kirchner y su ejército de asesores y estrategas de campaña deberán hacer piruetas para presentar a la primera dama como una candidata con consenso y mayor respeto por las instituciones. Hoy en San Luis, las principales facciones del Partido Justicialista que se oponen al kirchnerismo desconocerán su lanzamiento y anunciarán una batalla legal para impedir que su designación unilateral como postulante del oficialismo se concrete en el congreso partidario de la primera semana de agosto. También anunciarán una comisión para elegir un candidato presidencial que surja del peronismo. La senadora bonaerense deberá recurrir al mercado negro de dirigentes políticos para lograr apoyo de gobernadores radicales y peronistas que operan también por fuera de la organicidad partidaria.

Ramón Puerta, Carlos Menem y Adolfo Rodríguez Saá
Ramón Puerta, Carlos Menem y Adolfo Rodríguez Saá
A la guerra de facciones del PJ le siguieron ayer las amenazas de judicializar la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner. Sin postulaciones en el horizonte, el objetivo de máxima del peronismo antikirchnerista en la cumbre que arranca en San Luis será sumar al menos 300 congresales para declarar hoy mismo autoconvocado al órgano máximo del partido y desconocer por escrito la fórmula presidencial que encabeza la primera dama.

Es una misión difícil la que enfrentan los hermanos Alberto y Adolfo Rodríguez Saá con la ayuda del ex presidente Carlos Menem, el misionero Ramón Puerta, el porteño Miguel Toma y Eduardo Duhalde dando instrucciones desde las sombras. «Esperamos reunir entre 200 y 300 congresales para autoconvocar el congreso del PJ y empezar a sesionar. Si lo logramos, rechazamos la candidatura lanzada desde el kirchnerismo y fijamos nueva fecha de reunión», adelantó ayer Tomada, ex jefe de la SIDE en los 90, desde la localidad puntana de Potrero de Funes.

  • Impugnación

  • De no llegar a convocar a un tercio de los 900 congresales que componen el máximo órgano del PJ, partido intervenido por el kirchnerista Ramón Ruiz, el peronismo disidente adelantó que impugnará judicialmente ante la jueza María Romilda Servini de Cubría la candidatura unilateral de la senadora Kirchner. «Ahora la disputa entre en un terreno judicial. O ellos impugnan el congreso que queremos autoconvocar o nosotros impugnamos en la Justicia el que el oficialismo va a convocar a través de Ruiz para principios de agosto», graficó Toma la situación.

    En la reunión de hoy habrá básicamente cuatro alas peronistas opositoras:

  • Los hermanos Rodríguez Saá, anfitriones de la cumbre, coquetean con la idea de lanzar una fórmula peronista disidente. «Si los compañeros me lo piden...», razona Adolfo ante sus íntimos.

  • Eduardo Duhalde ya le advirtió al gobernador de San Luis que prefiere ahorrar fuerzas para después de los comicios del 28 de octubre. Creen que muchos gobernadores e intendentes del conurbano esperarán a cerrar la renovación de sus cargos con el gobierno antes de rebelarse a partir de 2008.

  • Carlos Menem buscará recolectar adhesiones para sus candidaturas: a gobernador de La Rioja y también a presidente de la Nación.

  • El ex senador Puerta y Toma se mantienen expectantes. No quieren presentar hoy una fórmula alternativa y apuntan sus cañones al congreso del PJ que se realizará en agosto. Impugnar ese cónclave, o imponer allí una fórmula peronista no kirchnerista son las principales opciones que barajan.Ayer ya había 120 habitaciones de hotel reservadas en San Luis para los asistentes. El único gobernador presente será el neuquino Jorge Sobisch, otro que se presenta como presidenciable pero que tiene poco apoyo dentro del peronismo opositor por ser considerado ajeno al PJ. También estará el bonaerense Luis Abelardo Patti, quien tentado a competir por la gobernación bonaerense se autodefine como un peronista «ortodoxo y conservador, como la mayoría de los argentinos».

    El gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, señaló que apoya el pedido del justicialismo disidente para « normalizar» el PJ pero destacó que, en ese marco, apoyaría «a cualquier candidato que surja de la mayoría, incluida Cristina Kirchner».

    «El problema del peronismo no es la falta de candidatos, sino la ausencia del partido. Cualquier candidato que surja con la decisión de la mayoría yo lo apoyo, incluida la senadora», recalcó el salteño en un guiño evidente a la postulación de la senadora bonaerense. Romero informó que no estará presente en el encuentro de San Luis que comenzará hoy pero aclaró que adherirá a «todo lo que allí se resuelva respecto de la normalización del justicialismo».

  • Cena

    Anoche, la residencia de Alberto Rodríguez Saá ofició de búnker durante una cena con su hermano Adolfo, Toma, Puerta y Julio «Chiche» Aráoz. Allí se terminaba de definir la lista de oradores y el contenido de un documento que exhortará a la formación de un Frente Justicialista opositor, el rechazo de la candidatura de la primera dama y la formación de una mesa de acción política para analizar la posibilidad de presentar una fórmula propia en las elecciones del 28 de octubre.

    Disgustados porque Puertaestigmatiza a Roberto Lavagna como candidato de la Unión Cívica Radical, los lavagnistas Jorge Sarghini y Eduardo Camaño, presidente del congreso del PJ que se prepara para agosto, anunciaron que al igual que Romero no participarán de la reunión de Potrero de Funes. «No veo bien que se las haga a las apuradas», fue la objeción de Sarghini, candidato a gobernador bonaerense de la coalición que lidera el ex ministro de Economía de Néstor Kirchner y de Eduardo Duhalde.

    El diputado y vocero de la Casa Rosada en el congreso, Carlos Kunkel, lanzó ayer duras críticas a los sectores del adolfismo, el menemismo y el duhaldismo que convocaron a una cumbre anti-k al advertir que «cuando ellos se juntan, siempre es peligroso».

    E.R.
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