- ámbito
- Portada Principal
Afirman que Tucumán no volverá a la Ley de Lemas
"No actuamos como órgano externo de los poderes públicos ni de instituciones privadas, pues únicamente nos pronunciamos por medio de sentencias, en el ámbito jurisdiccional, y de acordadas y resoluciones, en cuestiones de superintendencia", manifestó el titular del alto tribunal, Antonio Gandur.
El establecimiento del nuevo sistema electoral es clave para saber con qué sistema -y cuándo- el gobernador José Alperovich convocará a comicios para convencionales, porque algún sector del justicialismo cree que debe hacérselo mediante la Ley de Lemas (un artículo de la Carta Magna vigente dice que los constituyentes deben elegirse de la misma forma que los actuales legisladores).
En la penúltima sesión del año pasado, la Cámara habilitó la enmienda parcial de la Carta Magna, sancionada en 1990 a instancias de Fuerza Republicana y que impide la reelección de las actuales autoridades (gobernador, vice, legisladores, intendentes y concejales).
El 15 de setiembre de 2004, la Legislatura derogó por unanimidad la Ley de Lemas (regía desde 1991 en la provincia), ya que los 36 legisladores que estaban presentes en el momento de la votación (cuatro estaban ausentes) le bajaron el pulgar a esta norma, cuyo desmantelamiento había sido propuesto por el vicegobernador.
La Ley de Lemas establecía que, salvo para los cargos de gobernador e intendente, los legisladores y ediles debían elegirse mediante el sistema de sublemas, razón por la cual cada partido podía presentar una cantidad sin límites de listas de postulantes, cosa que sucedió en los últimos comicios, con 1.800 sublemas.
El sistema de lemas regía en Tucumán desde hace 15 años y, precisamente, se aplicó por primera vez en los comicios de noviembre de 1989, que se convocaron para elegir a los convencionales que reformaron la Constitución en 1990 (en esa oportunidad sólo se presentaron 36 sublemas).
En 1991, durante las elecciones en que Ramón Ortega fue elegido gobernador, el número de sublemas subió a 242 y en 1985, cuando Antonio Bussi llegó al Poder Ejecutivo, la cifra ascendió a 2.080, mientras que en 1999 (el electo fue Julio Miranda) se anotaron 1.879 sublemas.
Durantes las elecciones de junio de 2003, en las que Alperovich resultó electo, los medios nacionales se hicieron eco de la gran cantidad de sublemas, en muchos de los cuales se postulaban payasos, travestis, ex boxeadores o pastores, quienes se presentaban como candidatos a legisladores y a concejales.
Tal fue la cantidad de sublemas que se inscribieron -la mayoría pertenecían al justicialismo- que hasta hubo que publicar una guía -como las de teléfono-, en la que figuraba el número de sublema y quiénes eran los candidatos.
Durante las dos últimas elecciones generales de la provincia (1999 y 2003), la Junta Electoral debió alquilar un cuartel (el ex Comando de la Quinta Brigada de Infantería) y un predio ferial para efectuar el recuento de votos que, en muchos casos, se prolongó durante un mes.
Dejá tu comentario