31 de marzo 2005 - 00:00

Argentina quedó a un solo paso de alcanzar Alemania

Centro de Galetti, remate de Crespo y gol de Argentina. Los dos se confunden en un abrazo tras el tanto que dio el triunfo ante Colombia. La clasificación a Alemania está cerca.
Centro de Galetti, remate de Crespo y gol de Argentina. Los dos se confunden en un abrazo tras el tanto que dio el triunfo ante Colombia. La clasificación a Alemania está cerca.
Si algún valor tiene el triunfo logrado ante Colombia es --sin dudas-la importancia que tiene para lograr una clasificación anticipada para estar en Alemania el próximo año. Futbolísticamente, sirve para analizar una nueva versión de estos dobles equipos que comenzó a presentar Pekerman. Con otros jugadores, nuevas dinámicas, diferentes estrategias.

En este caso jugando con tres enlaces diferentes con la imposición de Riquelme, Cambiasso y Saviola (en un momento), a los que se sumaban Zanetti y Sorín para formar un quinteto generador de ataque. Aunque Crespo debió batirse solo contra el resto y Colombia, esperó hasta cuando estaba en desventaja. Por impotencia o porque la defensa de Argentina no mostraba fisuras.

A este equipo de Argentina le costó más de lo pensado enfrentar a un equipo de Colombia que lo complicó. Primero poniendo mucha gente sobre su propio terreno, buscando no dar fisuras por donde se pudieran filtrar algunas de los estiletazos que, seguramente, esperaban que partieran desde el mediocampo de Argentina. Sin embargo, debieron pasar muchos minutos para que el equipo se acomodara en el terreno, porque debía ajustar muchas piezas.

Entre las principales que Riquelme se acomodara sobre un sector que le permitiera realizar lo que esperaba la defensa oponente y que no podía concretarlo.Un poco porque Cambiasso trabajaba muy cerca uno del otro, quitándole espacio y, por momentos, encimándose en la misma función. Otra, porque Zanetti partía por derecha casi siempre desconectado del resto. Algo parecido a lo de Sorín, mientras que Mascherano y Luis González --generalmenteestaban más atentos a la contención que al ataque.

Si los partidos se miden por el trabajo de los arqueros, se podrá decir que Calero le sacó un buen remate a Crespo, que Abbondanzieri otro a Hernández y para computar un remate al inicio que pareció que el arquero la sacaba detrás de línea (luego la TV señaló que no) y hubo diez minutos donde Saviola colocó dos pelotas que cruzaron el área sin consecuencias.

Muy poco para un partido que, en los pronósticos previos, prometía mucho más.
Colombia seguía (con un hombre menos)a «pura marca», que es como decir aferrado a la igualdad, esperando un contraataque que no llegaba nunca. Era un monólogo de Argentina: un ataque tras otro, por arriba, por abajo, hasta que Galetti (que ingresó por Mascherano) cruzó una pelota y Crespo acertó en su insistencia de buscar, aunque casi siempre sin encontrar la pelota. Del resto es muy poco lo rescatable. Se podría decir que casi nada.

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