Atentado en restaurante de Israel deja al menos 19 muertos

Sucedió en un local de la calle principal del puerto de Haifa. El lugar estaba atestado de clientes. Hubo 50 heridos además de las víctimas fatales. Una mujer palestina se inmoló en el restaurante, que quedó destruido. El grupo Yihad Islámica se adjudicó la responsabilidad del ataque.

Haifa (AFP) -. Diecinueve personas, entre ellas cinco niños, murieron y 50 resultaron heridas en un atentado suicida perpetrado este sábado por una palestina en un restaurante de Haifa, en el norte de Israel, durante el sabbat y la víspera del comienzo de la celebración del Yom Kippur, la fiesta más sagrada del judaísmo.

Por otra parte, un niño palestino de 9 años y un activista, autor de un atentado sangriento, murieron durante una operación del ejército israelí en Tulkarem, en el norte de Cisjordania.

Israel atribuyó la responsabilidad del atentado a la Autoridad Palestina, acusándole de no haber "desmantelado las organizaciones terroristas".

Dejando planear la amenaza de una respuesta, el viceprimer ministro israelí Ehud Olmert estimó que Israel tenía "la obligación de destruir las infraestructuras terroristas (...) en primer lugar en Gaza", pero también en Cisjordania.

Según la radio israelí, el estado hebreo tiene previsto responder duramente por la noche.

Yasser Arafat y la dirección palestina al completo "condenaron enérgicamente" el atentado, "sobre todo porque se produce la víspera del Kippur", mientras el primer ministro palestino designado Ahmad Qureia instaba a los grupos armados palestinos a poner fin "inmediatamente" a los ataques contra civiles.

Olmert dejó entender claramente que no daba crédito alguno a este llamamiento al declarar: "Los palestinos no quieren y no tienen la intención de "desmantelar los grupos armados (...) lo que significa que somos nosotros los que tenemos que hacerlo".

El ministro de Salud israelí Danny Naveh, perteneciente al ala dura del Likud (derecha), la formación de Sharon, alzó el tono al estimar que este atentado constituía "una ocasión de concretar la decisión del gabinete de sacarse de encima a Arafat" pero, según la radio, las represalias de Israel no tendrán como blanco al dirigente palestino.

El gabinete de seguridad israelí decidió el 11 de septiembre, después de dos atentados suicidas palestinos, "deshacerse" de Arafat, sin precisar cuándo ni cómo lo haría.

El sábado, el jefe en Líbano del movimiento palestino islamista Hamas, Ossama Hamdán, aseguró que cualquier acto de Israel contra Yasser Arafat le privará de "toda posibilidad de seguridad y estabilidad e intensificará" la resistencia.

El atentado, cometido poco antes de las 14H30 (12H30 GMT), tuvo lugar en un restaurante atestado de gente situado a orillas del mar, en la entrada sur de Haifa, una localidad portuaria en la que vive una importante minoría árabe.

El movimiento radical palestino Yihad Islámica reivindicó el atentado, cometido por una abogada de 29 años, hermana de un activista palestino al que mató el ejército israelí en junio pasado.

El último balance de la policía daba cuenta de 19 muertos, entre ellos cinco niños, y unos 50 heridos.

El restaurante Maxim, que quedó devastado, pertenece a dos familias: una árabe y otra judía.

Varios árabes israelíes murieron en el ataque.

El atentado tuvo lugar pese a un bloqueo total de Cisjordania y de la franja de Gaza impuesto desde el viernes en previsión del Yom Kippur (el Día del Gran Perdón), que se celebrará del domingo por la tarde al lunes por la noche y debido al cual Israel se aislará totalmente del mundo.

Suscitó indignación en el mundo entero y fue condenado por la ONU, la Unión Europea, Washington, París, Londres, Oslo y Berlín, entre otros.

Los últimos atentados suicidas en Israel remontan al 9 de septiembre, cuando dos kamikazes se hicieron saltar por los aires con unas horas de intervalo: uno de ellos cerca de Tel Aviv y el otro en Jerusalén, dejando un saldo de 15 muertos y numerosos heridos.