15 de septiembre 2008 - 00:00

Binner debe aprender de Urribarri

Aunque aliado oportunista del campo durante el prolongado conflicto con el gobierno nacional, el mandatario socialista de Santa Fe, Hermes Binner, desató ahora la furia de los chacareros de la provincia al anunciar su intención de aumentar hasta ocho veces -en algunos casos- el inmobiliario-rural. Con un camionetazo en la ciudad de Casilda, los dirigentes le exigieron que dé marcha atrás y que imite a su vecino de Entre Ríos, el justicialista Sergio Urribarri, quien la semana pasada debió suspender el incremento en ese impuesto forzado por la fuerte presión que ejerció el sector liderado por Alfredo de Angeli. Binner ya anticipó que no hará lugar al reclamo, quizá porque piense que revisar el proyecto y buscar consenso podría terminar siendo visto como un acto de capitulación cuando no lo es, porque revelará prudencia.

Hermes Binner
Hermes Binner
En medio de diversas urgencias financieras y acorralados por los coletazos políticos del conflicto agropecuario, los gobernadores de Entre Ríos (Sergio Urribarri), Santa Fe (Hermes Binner), Córdoba (Juan Schiaretti) y Buenos Aires (Daniel Scioli) buscan alternativas para aumentar la recaudación y actualizar los tributos, incluso en el sector rural, con subas que trepan hasta 150%, como en el caso de Santa Fe.

Esta, precisamente, exhibió en los últimos días una postal clara de las inconveniencias de algunas posturas oportunistas asumidas durante el enfrentamiento entre el campo y el gobierno, que pueden terminar convirtiéndose en un búmeran. El viernes, durante un acto por el Día de la Industria en Casilda, el socialista Binner se topó con un camionetazo de los chacareros santafesinos que exigen que el gobernador dé marcha atrás en su intento de incrementar el impuesto inmobiliario rural, que en algunos casos treparía hasta ocho veces el valor actual.

Intemperante, el mandatario no meditó la experiencia reciente de su vecino de Entre Ríos, el justicialista Sergio Urribarri -quien debió dar marcha atrás con una medida similar merced a la presión de ruralistas liderados por Alfredo de Angeli- y ratificó que mantendrá la idea original del proyecto de reforma tributaria, que tiene incluso un alcance mayor.

  • Sorpresa

  • Sorprendió Binner con esa decisión por su reconocida postura a favor del campo en la batalla por las retenciones móviles. En esa oportunidad, el ex intendente de Rosario lanzó a los cuatro vientos su idea de que el gobierno nacional debía convocar al diálogo a los dirigentes rurales para lograr un acuerdo sobre ese polémico impuesto. Una estrategia que el campo sugiere que aplique ahora en su provincia e inclusive que imite a Urribarri, quien apeló a la prudencia de suspender por 45 días la suba. Por lo pronto, Binner sólo concedió lo primero. Recibirá esta semana a los representantes del campo para escuchar sus planteos.

    Como parte del rechazo a la iniciativa, la Federación Agraria Argentina (FAA) solicitó al gobierno de Santa Fe que retire el proyecto legislativo que aumenta ese tributo en el marco de una amplia reforma impositiva. La decisión fue tomada luego de una reunión entre dirigentes zonales de la FAA y legisladores provinciales, en la que se consideró que el proyecto «no sigue los principios básicos de equidad y capacidad contributiva».

    El aumento del «avalúo» implica, por ejemplo, que un pequeño propietario de 88 hectáreas del departamento Rosario que paga por año $ 1.612 de impuesto inmobiliario rural pase a tributar $ 8.888 en el mismo período.

    Por su parte, el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, atento a la situación de su colega de la poderosa Región Centro, anunció que consensuará con las entidades del campo el valor del impuesto inmobiliario rural y reiteró su compromiso de acompañar el planteo realizado por el sector productivo de calcular el tributo de acuerdo con el valor de producción de la tierra y no con el valor de venta. En este sentido, manifestó: «Dar vuelta la página de los enfrentamientos, apostar al diálogo y alcanzar los consensos que nos permitan, de cara al Bicentenario, fijar políticas de mediano y largo plazo que trasciendan a un gobierno, que permitan aumentar la producción, y garanticen el desarrollo de la patria».

  • Posibilidades

    En Río Cuarto, donde dejó formalmente abierta la 74ª edición de la Exposición Rural, el mandatario provincial señaló que «el productor debe pagar según las posibilidades productivas; por eso debemos fijar el valor de la producción de acuerdo con la composicióneconómica y el valor de lo que pueda producir el campo». 

    Por último, en Buenos Aires la situación también es compleja. Aunque Daniel Scioli dio por terminada al menos por este año la discusión de nuevas subas de impuestos (logró ya una amplia reforma de Ingresos Brutos), todo indica que en 2009 la provincia abrirá el debate por el inmobiliario rural. Esa intención que el campo ya olfatea dio algunas señales el mes pasado en la recaudación, que cayó casi 7% -al igual que en Santa Fe-, producto de la retracción en el cumplimiento del pago de la cuota del inmobiliario rural.
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