Miles de fieles marchan a la Basílica de Luján

Miles de personas participaban de la trigésima peregrinación de los jóvenes al santuario de la Virgen de Luján, que se realiza desde el barrio porteño de Liniers hacia la basílica de esa ciudad bonaerense.

Miles de jóvenes volvieron hoy a peregrinar desde el barrio porteño de Liniers hasta la Basílica de Luján al cumplirse 30 años de la primera peregrinación al santuario argentino que más fieles convoca.

El 25 de octubre de 1975 el padre Rafael Tello y un grupo de sacerdotes y laicos conmovidos por la religiosidad popular concretaron la primera caminata juvenil a Luján, con una participación de alrededor de 60 mil personas.

Aquella expresión de fe creció de manera ininterrumpida año tras año hasta alcanzar el millón de peregrinos.

Mañana a las 12 partirá, como es tradición, la columna principal con la imagen de la Virgen desde el santuario de San Cayetano de Liniers.

"Madre, ayúdanos. Queremos ser un solo pueblo" es el lema elegido para esta oportunidad que, a modo de oración y reflexión, acompañará a los caminantes durante mañana.

El cardenal primado de la Argentina, Jorge Bergoglio, presidirá el domingo, a las 7, la misa central en la plaza Manuel Belgrano, frente a la basílica.

Desde la tarde del sábado y durante toda la noche y madrugada del domingo habrá misas a cada hora y confesiones.

Se prestará especial atención a los peregrinos que caminan solos, es decir sin parroquias o comunidades.

Con motivo de cumplirse los 30 años de la peregrinación, Bergoglio dispuso que tanto el sábado como el domingo se celebre en todas las parroquias e iglesias la misa de Nuestra Señora de Luján.

Tras 60 kilómetros de marcha, con paradas establecidas en Morón, Merlo, La Reja y General Rodríguez, muchos peregrinos llegarán exhaustos hasta la basílica y durante el camino serán asistidos por servidores, paramédicos y boys scouts.

La peregrinación juvenil a Luján se ha ido convirtiendo en la máxima expresión de religiosidad popular de Argentina.

Cuando hace treinta años sus organizadores sugirieron la idea de expresar con un gesto concreto las preocupaciones y anhelos de gran parte de la comunidad, surgió la iniciativa de promover la primera peregrinación: "Los jóvenes peregrinan a Lujan por la Patria" fue la convocatoria lanzada en momentos en los que el país se sumía en una escalada de violencia y pocos meses antes de que se instaurara la dictadura militar.

En aquellos primeros años resultó fundamental la visión del padre Tello y la impronta del padre Lucio Gera, uno de los teólogos argentinos más relevantes de las últimas décadas.

Además, lo que comenzó siendo un proyecto de pocos, pronto recogió el apoyo de otros sectores de la Iglesia, aunque parte de la jerarquía mantuvo cierto recelo hasta que, con el tiempo, la peregrinación se transformó en el acontecimiento de religiosidad popular más trascendente de Argentina.