Un oficial inspector de la Policía Bonaerense fue asesinado a balazos por la espalda, por dos delincuentes, cuando descubrieron su uniforme en la parte trasera del vehículo que pretendían robar. En lo que va del año, ya son 66 los policías asesinados, 29 de ellos de la Bonaerense y 37 de la Federal.
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Se trata de Silvio Luis Suárez, de 32 años, que prestaba servicio en la Jefatura Departamental de San Martín, y fue asesinado en la calle 382 y Triunvirato, del barrio Calchaquí, de Quilmes, al sur del Gran Buenos Aires.
• El caso
El inspector Suárez había dejado la casa de sus suegros y se dirigía a su trabajo en la departamental de San Martín cuando fue interceptado por los dos ladrones de entre 20 y 25 años.
Voceros policiales confirmaron ayer que Suárez «fue virtualmente ejecutado por los ladrones, al descubrir su uniforme y que se trataba de un policía».
Fuentes del caso explicaron que Suárez dialogaba con un vecino desde el interior de su automóvil, cuando dos ladrones armados se acercaron con fines de robo. Al parecer, uno de los ladrones intentó entrar al auto por la puerta trasera y cuando vio el uniforme policial de Suárez, lo fusiló por la espalda «por el solo hecho de ser policía», agregó una fuente.
Tras el crimen, los asesinos huyeron sin robar ninguna de las pertenencias de la víctima. Cuarenta minutos después el cuerpo de Suárez fue hallado por efectivos de la Comisaría 9ª de Quilmes que recibieron el alerta de los vecinos.
• Familia
El policía, oficial de servicio en la Jefatura Departamental de San Martín, tenía cuatro hijos: dos nenas de 2 y 6 años de su primer matrimonio; y los mellizos que recientemente había tenido con su actual pareja.
Con este crimen, Suárez se convirtió en el integrante número 29 de la Policía Bonaerense muerto en lo que va del año en enfrentamientos con la delincuencia.
Tras el crimen de Suárez, la fuerza de seguridad comandada por el comisario Oscar Alberto Sobrado, desplegó un intenso operativo de rastrillaje en la zona con el objetivo de hallar a los delincuentes homicidas.
Paralelamente, desde la fiscalía de Quilmes a cargo de Ricardo Maidana, fueron citados a declarar vecinos del oficial que podrían aportar información fisonómica sobre los delincuentes, para la confección de un identikit de los criminales.
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