25 de septiembre 2007 - 00:00

Los franceses ecológicos

El Citroën C-Cactus tiene un motor híbrido turbodiésel HDI y podría venderse al precio de un C4 básico. Peugeot hace su apuesta en los autos medianos con la versión híbrida del 308.
El Citroën C-Cactus tiene un motor híbrido turbodiésel HDI y podría venderse al precio de un C4 básico. Peugeot hace su apuesta en los autos medianos con la versión híbrida del 308.
El grupo Peugeot Citroën está teniendo un gran desarrollo en crear motores diésel con las mejores condiciones posibles para el medio ambiente. Esto no es sólo visible a través del reducido nivel de consumo de sus vehículos diésel, sino que se manifiesta también en nuevas tecnologías, como el filtro de partículas y la posibilidad, cada vez más vigente, de utilizar un motor clásico diésel unido a un propulsor eléctrico. Para muchos, una de las opciones con mayor futuro a un corto plazo.
Con el C-Cactus, un concept car ingenioso presentado como primicia mundial en el Salón de Francfort 2007, Citroën desarrolla una nueva visión del automóvil esencial.
Está fabricado con una importante proporción de materiales reciclados o reciclables y, al igual que la planta a la que debe su nombre, consume poco. Gracias a su propulsor híbrido HDi y a su peso de 1.306 kg, su consumo medio es de apenas 3,4 litros cada 100 kilómetros, y su nivel de emisiones de CO2 es de 78 g/km. Además, el C-Cactus no es más caro de producir que una berlina familiar de gama media. Su bajo costo de fabricación se explica en el uso de materiales nuevos y en una racionalización en su concepción, que ha permitido reducir el número de piezas utilizadas. Poco más de 200 son las que forman el habitáculo del C-Cactus, es decir, casi la mitad que las de una berlina tradicional de tamaño equivalente.
Su habitáculo, pensado para el confort y el bienestar de sus ocupantes, es de tamaño familiar, con 4,2 metros de largo por 1,8 metro de ancho.
Dispone de equipamientos interesantes, como climatización automática, techo acristalado panorámico y limitador/regulador voluntario de velocidad.

Precio accesible

Gracias a las soluciones económicas aplicadas en el C-Cactus, su costo de fabricación es moderado, lo que permite el uso de un propulsor híbrido diésel sin que su precio supere el de un C4 básico.
Para conseguir este resultado, se ha dado prioridad a los equipamientos esenciales para el confort de sus ocupantes y se han explorado nuevas vías de diseño, para conseguir que economía y ecología no sean sinónimo de austeridad.
Por ejemplo, se ha suprimido la instrumentación del tablero: se trasladaron sus funciones a la consola central o a los mandos fijos del volante. La consola central integra los parlantes, la palanca de cambios y una pantalla táctil, que permite acceder al ordenador de a bordo, al sistema de navegación y al regulador del climatizador.
Los mandos de los intermitentes, las luces, las alertas luminosas, el velocímetro, los limpiaparabrisas, el indicador y el limitador/regulador voluntario de velocidad están en los mandos fijos del volante.
Otro ejemplo de simplificación es la pieza utilizada para el paragolpes delantero, que incluye los faros y los chevrones. Es idéntica a la que forma la parte baja del portón del baúl. Esta elección, que contribuye también al diseño del C-Cactus, permite reducir los costos de producción de estos elementos.
La simplicidad es también un rasgo del bloque delantero, que está constituido solamente por dos elementos: un capó fijo que engloba los laterales delanteros y una abertura que permite acceder a las funciones de mantenimiento del vehículo (control del aceite, líquido de los limpiaparabrisas, etc.).
Por otro lado, la reducción del número de piezas permite limitar la cantidad de materia prima consumida. Además, una gran parte de los materiales utilizados es reciclada o reciclable. Es el caso del parabrisas y de las ventanas, fabricadas con cristal reciclable. Los neumáticos también lo son, al igual que la estructura de las puertas, que está hecha de acero en bruto, sin pintura ni barniz, pero tratado contra la corrosión.
La tapicería es de cuero reciclado, hecho de los restos de cuero inutilizables para los tapizados tradicionales; muchas piezas son de corcho; el borde de los paneles de las puertas es de lana, sin aditivos químicos y completamente reciclable y biodegradable.
La velocidad del C-Cactus está limitada voluntariamente a 150 km/h. La «llave de contacto» del C-Cactus es un lector MP3 portátil; una pantalla táctil, situada en la parte fija del volante, reconoce la «llave» y permite la puesta en marcha del vehículo.

El Peugeot 308 híbrido

Desde hace varios años, la preservación del medio ambiente forma parte integrante de la política de desarrollo del Grupo PSA Peugeot Citroën.
Esta preocupación, basada en fuertes convicciones, se concreta en resultados tangibles. En Europa, la comercialización en 2006 de un millón de vehículos del Grupo PSA Peugeot Citroën, que emiten menos de 140 g de CO2 por km, ha contribuido a hacer del Grupo uno de los primeros fabricantes mundiales en materia de autos con reducidas emisiones de gas de efecto invernadero.
El demostrador tecnológico 308 hybride HDi, presentado con motivo del Salón de Francfort, constituye un paso más hacia una comercialización prevista para 2010.
Los desarrollos realizados desde la presentación del primer demostrador 307 Hybride HDi en 2006 vienen a confirmar el sólido fundamento de las opciones estratégicas y técnicas iniciales.
En primer lugar, la elección del motor diésel en la cadena de tracción híbrida paralela para obtener un fuerte descenso de los consumos y, en segundo lugar, la introducción de esta tecnología en dos vehículos familiares correspondientes al núcleo esencial del mercado europeo.
El demostrador presentado es un 308 de cinco puertas de un nivel de acabado Premium Pack, en el que fue implantada la arquitectura híbrida más optimizada actualmente, asociada a una caja de cambios mecánica pilotada de seis marchas.
El motor turbodiésel 1.6 HDi con filtro de partículas, asociado a un motor eléctrico de 16 kW, proporciona una potencia disponible de 132 CV comparable a la del 308 de motorización térmica 2.0 l HDi FAP de 136 CV.
El consumo en ciclo mixto es de 3,4 litros cada 100 kilómetros y 90 g/km de CO2, con una ganancia de 38% con respecto a un 308 HDi equivalente.
Además, la motorización fue diseñada para dar respuesta al nivel de exigencia de la futura directiva Euro V, que entrará en vigor en 2009 y para ofrecer la posibilidad de rodaje exclusivo en el modo eléctrico ZEV (Vehículo Emisión Cero), para una circulación en los centros urbanos reglamentados.
La síntesis aerodinámica de la berlina 308 (Cx de 0,29) y la adopción de neumáticos Michelin Energy Saver con resistencia al rodamiento reducida contribuyen también a las prestaciones de este demostrador.

Un paso hacia la comercialización

Por supuesto, los ejes de las investigaciones respecto del precedente concept 307 Hybride HDi presentado en 2006 han llevado a un nuevo desarrollo de la tecnología en la estructura del nuevo 308 y sobre la compatibilidad con la futura directiva Euro V.
La implantación de los elementos propios de la tecnología hybride HDi ha tenido en cuenta las estrictas especificaciones técnicas de los vehículos de serie para conservar el alto nivel de seguridad obtenido por el 308.
Con respecto al demostrador anterior, los procesos técnicos realizados en una configuración próxima de la serie y el aumento de potencia del grupo motopropulsor se obtuvieron manteniendo un mismo nivel extremadamente bajo de consumo.
Con el fin de obtener un balance económico favorable, la utilización de componentes y órganos de los modelos del grupo formó parte de las prioridades. El número de elementos específicos en la hibridación del 308 fue reducido en aproximadamente 30% respecto de los del demostrador precedente 307 Hybride HDi.

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