2 de octubre 2019 - 00:00

Uso de fertilizante ecológico: clave de rendimiento óptimo

Desde la empresa FEPUMS, Santiago Eliceiry desarrolló el sistema "bocashi", que permite obtener garantizar mejor calidad en los cultivos de cannabis. También sirve para hortalizas y montes frutales.

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Santiago Eliceiry tiene 38 años, nació en la ciudad de Chacabuco, provincia de Buenos Aires, y es el CEO de Fertilizantes Ecológicos para un Mundo Sano (FEPUMS), un emprendimiento que inició hace 4 años junto con el ingeniero agrónomo Iván Jaroszyk y con Mauricio Torlo, un estudiante de Administracion Rural. La empresa se dedica a la elaboración de fertilizantes orgánicos a base de fermentación, con un sistema llamado “bocashi”, que se basa en la cocción de materiales sobre la base de vapor. Además se ocupa de la elaboración de fertilizantes follares y reestructuradores de suelo.

En la actualidad, FEPUMS cuenta con dos tipos de productos. El primero está hecho a base de compost de caballos, ovejas, conejos, gallinas ponedoras , tierra de monte frutal, humus de lombrices, extractos de ortigas, extracto de bananas y aserrín neutro, en lo que refiere a la parte de taninos. También se proveen de harina de pescado orgánica para el fosforado de suelos. El segundo producto, referido al control de plagas, está hecho a base de semillas de paraíso, raíces de cicuta, laurel, té, ortigas, extracto de tabaco, ajo, cebolla y un yuyo llamado “lengua de vaca” que, mezclados en una combinación controlada, combaten plagas como hormigas, ácaros y hongos.

Estos productos están diferenciados para cultivos de hortalizas, montes frutales y, como tope de gama, para cannabis.

“Estamos en la etapa de implementar el sistema de biodigestores para la obtención de gas metano para generar biol (producto magro, en estado líquido que se implementa en sistemas de riego) y además fabricamos nuestra propia maquinaria reciclando artefactos abandonados en desuso y modificándolos para adaptarlos a nuestras necesidades”, explica Eliceiry.

Además agrega que “en cuanto a los biodigestores se trata de la obtención de gas metano, que se utiliza para la parte de la producción, la industria, y para la utilización de grupos electrógenos, calderas; y por otra parte el biol que, tal como se explicó anteriormente, es un fertilizante líquido que es para comercializar. Nuestros productos estrellas son el A0001 que tiene un compuesto nitrogenado que le aporta vitalidad a la planta y el A0004 que es fosforado y contribuye para darle estabilidad a la planta en la etapa de floración”.

Respecto de las razones por las cuales comenzaron a incursionar en el sector del cannabis, Santiago responde: “Nuestra inquietud por ingresar a la industria del cannabis se basa en su gran potencial, sabiendo que es un requisito fundamental utilizar productos orgánicos e innovadores para mejorar el rendimiento y la calidad de la producción. Y también para adaptarnos a las exigencias de la temática, teniendo en cuenta que es la única forma para poder ser partícipes de ella”.

Con relación a la proyección para el año 2020, este emprendedor bonaerense comenta: “La visión a futuro inmediato es poder expandirnos en Argentina, así como también abrir mercado en países de la región, y en EE.UU., Canadá y Europa, ya que consideramos que nuestro producto es único en el mercado”, concluyó Santiago Eliceiry.

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