12 de julio 2018 - 23:03

Vidal, en su laberinto: rechazo al aborto y blanqueo de inflación

• LA GOBERNADORA RELANZÓ AYER PROMOCIÓN PARA REACTIVAR CONSUMO
Reconoció que los índices son mayores a los que se esperaban. Se reunió con el flamante obispo platense, que el lunes pidió vetar ley que legaliza aborto.

Realidad. Juan Curutchet y María Eugenia Vidal, ayer durante el relanzamiento de las promociones en compras en supermercados con tarjetas del Banco Provincia, reconocieron que la inflación superó las previsiones oficiales.
Realidad. Juan Curutchet y María Eugenia Vidal, ayer durante el relanzamiento de las promociones en compras en supermercados con tarjetas del Banco Provincia, reconocieron que la inflación superó las previsiones oficiales.
María Eugenia Vidal volvió a dar en las últimas horas señales claras de su postura dentro del laberinto del oficialismo. Reconoció que la inflación resulta mayor a lo que se esperaba y le abrió, además, las puertas de su despacho al flamante obispo de La Plata, monseñor Víctor Fernández, quien el lunes le reclamó al Presidente que vete la ley de legalización del aborto, en caso de que finalmente se apruebe en el Senado.

"Fue una reunión protocolar por la asunción reciente del obispo", minimizó una fuente con acceso al entorno de la gobernadora y precisó que el sucesor de Héctor Aguer y Vidal permanecieron en ese despacho por algo más de cuarenta minutos. No hubo foto ni declaraciones posteriores.

Pero los buenos entendedores no necesitaron de las palabras para comprender el alcance de ese contacto. La mandataria venía de posar con un militante provida para una foto que se tomó en el interior de la Catedral platense, en el tedeum patrio del lunes. Casi una ratificación, en rigor, de la postura pública que Vidal comparte con otros miembros de Cambiemos como el propio Mauricio Macri, la vicepresidenta Gabriela Michetti, la ministra Carolina Stanley, o el senador Federico Pinedo.

Además, la gobernadora mantuvo a principios de junio, en medio de la tensión por el acuerdo con el FMI y la inminente llegada de Fernández al obispado de la capital provincial, una reunión con el papa Francisco en Roma. En aquella oportunidad tampoco hubo foto pero sí trascendió una certeza: la enviada de Cambiemos motivó con su presencia un gesto para descomprimir las tensiones entre Bergoglio y el macrismo.

Ayer, más temprano, Vidal volvió a sacudir el tablero. Durante el relanzamiento de un beneficio de ahorro del 50% para compras en supermercados con tarjetas del Banco Provincia, reconoció que "la inflación es más de la esperada" y las tasas de interés son "muy altas".

"Estamos transitando meses difíciles, pero estamos convencidos de que vamos a superarlos juntos, de que la provincia y la Argentina se va a poner de pie. Hay que estar más juntos que nunca y el Estado no puede mirar para otro lado", afirmó Vidal.

Habló de las dificultades económicas que vive el país, pero se mostró optimista de cara al futuro.

"Como nosotros siempre decimos, gobernar es estar y hacer. Tuvimos un compromiso asumido. Sabemos que la inflación es más que la esperada y está pegando mucho más en los alimentos", expresó durante la presentación en la Gobernación junto al titular del BAPRO, Juan Curutchet.

Con matices, el tono del mensaje de Vidal fue similar al que eligió el propio Macri el lunes en el acto oficial por el Día de la Independencia en Tucumán, cuando admitió que el país "atraviesa una tormenta" provocada, en parte, por fallas de su "propia gestión".

"Estamos pasando una tormenta fruto de muchas circunstancias, entre ellas, temas de nuestra propia gestión, de los mercados externos y de las políticas tomadas por los gobiernos anteriores", sostuvo Macri secundado por gran parte de su Gabinete, legisladores y el gobernador anfitrión, el peronista Juan Manzur.

"Comparto las angustias del momento, pero estoy seguro de que vamos a llegar al país en el que todos los argentinos vamos a poder realizarnos", añadió el jefe de Estado quien, sin embargo, esquivó ese día el tedeum en la Catedral de la provincia, anticipándose al mensaje que más tarde proclamó el arzobispo local, Carlos Sánchez. "El aborto es muerte de un inocente", lanzó el religioso en sintonía con la ofensiva de los obispos contra el proyecto.

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