Quién es el verdadero dueño de Lala, el imperio que domina el mercado lechero de México

El control de una de las empresas lácteas más importantes de América Latina pertenece a una estructura familiar originaria del norte de México con amplia trayectoria industrial.

Lala, el gigante lechero de México.

Grupo Lala es un referente dentro de la industria alimentaria en el país, con una presencia que abarca desde la producción en cuencas lecheras hasta la distribución masiva en puntos de venta.

El origen y la propiedad de esta compañía se vinculan estrechamente con el desarrollo económico de la región de la Comarca Lagunera.

La administración de esta firma ha pasado por relevos generacionales que han mantenido la esencia operativa bajo un núcleo de accionistas específico.

Grupo Lala: el gigante lácteo que nació en el norte de México

Grupo Lala, S.A.B. de C.V. es, sin duda, un referente imprescindible en la industria alimentaria del país. Con sus raíces clavadas en la ciudad de Torreón, Coahuila, desde su fundación en 1949, la compañía ha logrado escalar desde una operación regional hasta convertirse en una potencia multinacional con presencia en Centroamérica, Estados Unidos y Brasil.

Lo que hoy conocemos como un emporio comenzó con un objetivo sencillo: la formación de la Unión de Crédito de Productores de Leche de Torreón, cuyo propósito era tecnificar la pasteurización y el reparto de leche en la Comarca Lagunera. A medida que el negocio maduró, Lala diversificó su oferta, integrando con éxito líneas de yogures, quesos y diversos derivados lácteos que hoy son básicos en las alacenas mexicanas.

Su camino hacia la consolidación global ha estado marcado por hitos clave:

• Expansión agresiva: Durante la década de los 2000, la firma aceleró su crecimiento mediante la compra de plantas y marcas estratégicas fuera de México.
• Consolidación en Sudamérica: En 2017, la adquisición de la brasileña Vigor posicionó a la empresa en uno de los mercados de lácteos más competitivos de la región.
• Cambios bursátiles: Tras haber ingresado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) en 2013, la compañía decidió recientemente iniciar su salida del mercado público para volver a un modelo de propiedad privada.

Tras años de operar como una empresa pública, la estructura interna de Lala dio un giro hacia una mayor concentración de capital. Mediante la recompra de acciones a inversionistas minoritarios, el grupo controlador retomó el mando casi total de la sociedad, lo que facilitó su retiro de la Bolsa de Valores.

En la actualidad, la batuta del grupo la lleva Eduardo Tricio Haro, quien es el accionista mayoritario y la figura de mayor peso en la organización. Vinculado al negocio desde sus inicios por herencia familiar, Tricio Haro controla aproximadamente el 98% de la participación de la empresa, lo que le otorga el mando absoluto sobre el rumbo del gigante lechero.

Desde su posición como presidente del Consejo de Administración —puesto que ocupa desde el año 2000—, ha sido el arquitecto detrás de la expansión de la marca, supervisando la entrada a nuevos mercados y el desarrollo de productos innovadores.