No consumas estas marcas de ramen instantáneo porque son malas, según estudio de la Profeco

Esta institución tiene como objetivo facilitar y mejorar el proceso de compra.

Profeco: de qué se trató el estudio de calidad de ramen instantáneo

Los análisis que realiza la Procuraduría Federal del Consumidr (Profeco) son muy tenidos en cuenta porque le permite a los consumidores tener más información a la hora de adquirir un producto o un bien.

Es que, luego de muchas averiguaciones, se comprobó que una buena cantidad de marcas que están presentes en el mercado, mienten o transforman sus etiquetas comunicando algo que no tienen con el objetivo de vender más.

En esta ocasión, conoceremos a las marcas de ramen menos recomendadas, según un análisis de Profeco.

Profeco: de qué se trató el estudio de calidad de ramen instantáneo

En 2021, la Profeco realizó un importante estudio en donde se revisaron las características de 33 marcas de sopas instantáneas, entre las cuales se incluyeron fideos orientales tipo ramen. Los aspectos a tener en cuenta fueron:

• la información de la etiqueta
• los sellos de advertencia
• el porcentaje de proteína, grasa, carbohidratos, calorías y sodio por cada 100 gramos de producto preparado

Profeco: estas son las peores marcas de ramen instantáneo

En definitiva, estas son las peores marcas del mercado, según sus características:

Sapporo

Esta marca lidera en contenido de sodio, con 398 miligramos por cada 100 gramos de producto preparado. También omite la información nutricional y presenta un alto contenido de calorías y grasas saturadas.

Chikara Udon

Es el segundo con mayor cantidad de sodio y no se ajusta a la normativa de etiquetado, ya que las instrucciones deberían estar en español, pero solo están en inglés.

Buldak Cheese

De los productos evaluados, este fue el que mostró la mayor cantidad de grasa, carbohidratos y kilocalorías. Tiene un exceso de grasas saturadas y sodio. Además, su publicidad es engañosa, ya que no contiene pollo a pesar de que lo promociona.

Myojo

El envase no se ajusta a la normativa de etiquetado. Igualmente, la marca no proporciona de manera adecuada la información sobre el contenido energético ni la información nutricional del producto preparado. Además, se ha encontrado que tiene un exceso de sodio, calorías, azúcares y grasas saturadas.