Ciencia: ¿por qué las personas consideradas bellas suelen vivir más años?

Checa qué es lo que dicen los expertos con entorno a la apariencia física y a la longevidad: ¿hay algún tipo de relación?

Descubre el estudio de la ciencia que encuentra relación entre la longevidad y las personas atractivas. 

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Un nuevo estudio de la ciencia ha revelado que la apariencia física podría estar relacionada con la duración de la vida, generando un gran interés en la comunidad. Investigadores de las universidades estatales de Arizona y Texas han concluido que las personas percibidas como más atractivas tienden a vivir más tiempo que aquellas con menor atractivo físico. Estos hallazgos, publicados en la revista Social Science & Medicine, abren nuevas perspectivas sobre cómo la percepción de la belleza podría estar influenciada por la salud y, a su vez, impactar en la longevidad.

Para llevar a cabo esta investigación, los científicos analizaron los datos de miles de personas que se graduaron en la década de 1950. Utilizando fotografías de estos jóvenes, un panel de evaluadores asignó una puntuación de atractivo. Décadas después, los investigadores compararon estas calificaciones con los registros de mortalidad, encontrando una correlación notable entre el atractivo y la esperanza de vida.

Aunque las personas calificadas como menos atractivas mostraron una mayor tasa de mortalidad, los expertos subrayan que otros factores como la salud, la educación y el nivel socioeconómico podrían influir en esta relación. Por lo tanto, aún es necesario realizar más estudios para entender a fondo esta compleja interacción.

Por qué según la ciencia las personas más atractivas tienden a vivir más

El estudio reveló que los individuos clasificados en los niveles más bajos de atractivo tenían un 17% más de probabilidades de fallecer en comparación con aquellos considerados más atractivos. Sin embargo, cuando se examinaron las diferencias entre las personas con atractivo promedio y las de atractivo superior, las variaciones en la longevidad no fueron tan marcadas. Esto sugiere que, si bien un bajo atractivo puede estar asociado con una mayor mortalidad, ser extremadamente atractivo no necesariamente garantiza una vida más larga.

Los investigadores plantean que el atractivo físico podría ser un indicador de una salud robusta, lo cual podría explicar por qué las personas más atractivas tienden a vivir más. Por ejemplo, una mejor salud durante la juventud podría reflejarse en una apariencia física más agradable, que a su vez podría estar asociada con una menor incidencia de enfermedades y, por lo tanto, una vida más prolongada. Además, el atractivo puede estar vinculado a una mejor integración social y mayores oportunidades económicas, factores que también influyen en la longevidad.

A pesar de estos hallazgos, los autores del estudio advierten que la relación entre el atractivo físico y la longevidad es compleja y que aún no se puede establecer una causa directa. Es necesario realizar más investigaciones que exploren cómo otros factores, como la genética, el entorno y los hábitos de vida, interactúan con el atractivo para influir en la salud y la esperanza de vida.