20 de enero 2025 - 19:00

Por qué nos cuesta tanto perdonar a alguien, según la Psicología

Un tema muy delicado que requiere tiempo y trabajo para poder sanar.

Según la Psicología, por esto nos cuesta mucho perdonar a alguien, por más que queramos

Según la Psicología, por esto nos cuesta mucho perdonar a alguien, por más que queramos

La ciencia y la psicología nos permite conocer más en detalle como funciona nuestro cerebro y así poder encontrar explicaciones a los distintos acontecimientos que nos suceden a diario.

En esta ocasión, el enfoque estuvo en el perdón y en poder entender cuál es el motivo que aparece cuando no podemos olvidar algo que nos hicieron, pese a que tenemos la voluntad de hacerlo.

Pareja, pelea
Según la Psicología, por esto nos cuesta mucho perdonar a alguien, por más que queramos

Según la Psicología, por esto nos cuesta mucho perdonar a alguien, por más que queramos

Según la Psicología, por esto nos cuesta mucho perdonar a alguien, por más que queramos

Alejandra de Pedro, psicóloga, explica en un video por qué, a pesar de nuestra intención de perdonar, este proceso puede resultar complicado. Según la experta, perdonar no implica olvidar, justificar o reconciliarse, sino que es un proceso muy personal que tiene más que ver con el autocuidado que con la relación con la otra persona. De Pedro aclara que "perdonar a alguien no significa olvidar lo sucedido", y señala que, aunque a menudo se escuchan frases como "ya me dijiste que me ibas a perdonar, deja de sacar el tema", no siempre es fácil dejar de recordar.

Estos recuerdos pueden manifestarse como flashbacks o incluso pesadillas, lo que dificulta que la herida se cierre rápidamente. La psicóloga también enfatiza que "el perdón se otorga, pero la confianza se reconstruye y se trabaja", diferenciando ambos procesos como aspectos independientes. Además, aborda el mito de que perdonar equivale a justificar el daño recibido. "No necesitas entender por qué te hicieron eso, ni mucho menos justificarlo. Intentar comprender puede ayudar en algunos casos, pero no siempre es necesario y, en ciertos casos, puede incluso causar más daño", concluye.

La búsqueda de justicia puede coexistir con el perdón, según explica De Pedro. La psicóloga ofrece el ejemplo de situaciones donde es posible comprender el motivo detrás de una acción perjudicial, pero sin renunciar al derecho a la reparación del daño: "Si alguien te ha robado dinero, puedes perdonar entendiendo que la persona estaba desesperada, pero eso no implica que pierdas el derecho a pedir que te lo devuelvan".

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