Es una de las mujeres más ricas de Jalisco en 2025 y ha construido su poder gracias a un imperio inmobiliario

Es una de las mujeres más ricas de Jalisco en 2025 y ha forjado un imperio inmobiliario con Grupo Guía.

Es una de las mujeres más ricas de Jalisco en 2025 y ha construido su poder gracias a un imperio inmobiliario

Los millonarios en México no solo se concentran en la Ciudad de México o en Nuevo León. Jalisco, uno de los motores económicos más relevantes del país, se ha convertido en cuna de empresarios y empresarias que han logrado acumular grandes fortunas a partir de negocios sólidos y con visión de largo plazo. En 2022, la entidad aportó el 7.4% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, lo que confirma su relevancia en el escenario económico.

Dentro de este entorno competitivo, destaca un grupo de mujeres que, a base de talento, disciplina y visión empresarial, han escalado posiciones en sectores clave como el comercio, la industria y los servicios. Aunque históricamente se habla más de los grandes empresarios varones, lo cierto es que varias mujeres han logrado cimentar fortunas que las colocan como referentes en la región.

Una de ellas es Beatriz Alfaro Méndez, fundadora y presidenta de Grupo Guía, un emporio inmobiliario con más de dos décadas de historia que ha dejado huella en la Zona Metropolitana de Guadalajara. Su caso es emblemático porque combina éxito empresarial con un compromiso por impulsar un desarrollo urbano responsable.

Quién es Beatriz Alfaro Méndez, mujer poderosa de Jalisco

Beatriz Alfaro Méndez inició su trayectoria en el sector inmobiliario hace más de 40 años y en 1997 fundó Grupo Guía, empresa que hoy cuenta con más de 215 empleados y un portafolio de más de 300 propiedades en la capital jalisciense. Con visión estratégica, ha desarrollado 14 proyectos verticales, 10 horizontales y 20 plazas comerciales, consolidándose como una de las desarrolladoras más influyentes del occidente del país.

Su sello personal ha sido la creación de colonias y fraccionamientos icónicos como Valle Real, Lomas del Bosque y Atlas Colomos, que hoy forman parte de la identidad urbana de Guadalajara. Alfaro ha insistido en que el crecimiento de la ciudad debe darse de manera planificada, con acceso a servicios básicos como escuelas y hospitales, y con un control estricto en los permisos de construcción.

La empresaria considera que uno de los errores más comunes en el sector inmobiliario es levantar desarrollos sin la infraestructura necesaria o sin cumplir con las regulaciones. En ese sentido, Grupo Guía ha buscado diferenciarse por mantener altos estándares de calidad y por capacitar constantemente a su equipo. De hecho, la compañía cuenta con su propio diplomado inmobiliario, casi obligatorio para sus colaboradores, con el fin de garantizar un servicio profesional y ético.

Por su trayectoria, Beatriz Alfaro ha sido reconocida por la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), que le otorgó un premio anual por su contribución al sector. Además, su hijo, Pablo Errejón, actual director general de Grupo Guía, ha tomado la estafeta en la gestión de la compañía, asegurando la continuidad del legado familiar.

Más allá de las cifras y los proyectos, la filosofía de Alfaro Méndez se centra en la autenticidad y en valorar a cada cliente. Según sus propias palabras, “no se trata de vender por vender, sino de asesorar al cliente para que tome decisiones que impactarán en su vida”. Esa visión de largo plazo es la que ha permitido que su empresa crezca incluso en entornos económicos desafiantes.

Beatriz Alfaro Méndez

En la actualidad, su principal reto es incorporar con mayor fuerza la tecnología en el negocio inmobiliario. La digitalización del sector, asegura, será clave para mantenerse competitivos y responder a las nuevas demandas del mercado.

Con una fortuna cuya cifra exacta se desconoce, pero que la coloca como una de las mujeres más ricas de Jalisco en 2025, Beatriz Alfaro Méndez se ha convertido en un referente de liderazgo femenino en los negocios. Su historia es la prueba de que el talento y la visión pueden transformar una ciudad, consolidar un sector y abrir camino para que nuevas generaciones de empresarias sigan creciendo en el país.