Estos quesos de puerco cuestan menos de $20, tienen excelente calidad y Profeco la recomienda

Este hallazgo es de gran relevancia, pues desmiente la idea de que la buena calidad siempre va de la mano con un precio elevado.

En la búsqueda de productos accesibles y de buena calidad, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) es un referente clave para los consumidores mexicanos.

Recientemente, un estudio ha puesto en el foco a los quesos de puerco, un embutido popular en la gastronomía mexicana, revelando una excelente noticia: hay marcas que cuestan menos de $20, ofrecen una calidad excepcional y, por si fuera poco, la propia Profeco las recomienda.

Profeco: los quesos de puerco de menos de $20 que recomienda

La Revista del Consumidor aconseja a los consumidores revisar la fecha de caducidad y los contenidos de grasas saturadas y sodio en la etiqueta del empaque al momento de comprar queso de puerco. Asimismo, sugiere prestar atención al etiquetado frontal para comprender claramente su valor nutricional.

En su estudio sobre los mejores quesos de puerco disponibles en el mercado, la Profeco evaluó diversas marcas y presentaciones. Aquellos que destacaron por la veracidad en su declaración de nutrientes y su calidad sanitaria son:

• D-KAR ($7 con 100 g)
• Galicia ($14 con 100 g)
• Salamanca ($11 con 100 g)

Profeco: el resto de los quesos de puerco que también recomienda

• Alpino ($21 con 100 g)
• Tangamanga ($25 con 100 g)
• Capistrano ($25 con 100 g)
• FUD ($27 con 100 g)
• Peñaranda ($76 con 100 g)

Profeco qué es el queso de puerco

Según información de la Profeco, publicada en la Revista del Consumidor de mayo de 2025, el queso de puerco es un producto alimenticio elaborado a partir del procesamiento de la carne de cerdo, específicamente de los tejidos grasos y la piel de la cabeza del animal.

Este producto es popular en México por su sabor y forma parte de la oferta nacional de cárnicos, perteneciendo a la familia de los embutidos. Su composición no se limita a la carne de cerdo, sino que incluye también hierbas y otros aditamentos como conservadores, fosfatos, nitritos y una cantidad considerable de sal.

Sin embargo, la Profeco advierte que, aunque la sal y los aditamentos contribuyen a prolongar su vida útil y mejorar el sabor, un consumo elevado de sodio y grasas saturadas está relacionado con enfermedades cardíacas, como la hipertensión.

La Revista del Consumidor en su edición reciente destaca que "en México, más del 40% de la población adulta padece hipertensión y la mitad no lo sabe". Por ello, reducir la ingesta de productos con alto contenido de sodio es fundamental para un consumo seguro.