A sus 76 años, Jorge Ortiz de Pinedo no solo sigue vigente como productor y figura clave del teatro mexicano, sino que también ha sabido darle un nuevo sentido a su vida lejos del ajetreo de la Ciudad de México. Luego de ser diagnosticado con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), el actor y comediante tomó una decisión que cambiaría su estilo de vida para siempre: mudarse al nivel del mar.
Así es la mansión de Jorge Ortiz de Pinedo en Acapulco: un refugio de lujo frente al mar
Entre mansiones de millonarios, la casa de Jorge Ortiz de Pinedo en Acapulco destaca por su estilo frente al mar y detalles pensados para su salud.
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La nueva residencia de Ortiz de Pinedo no está en cualquier lugar: está en Acapulco, uno de los destinos más emblemáticos de México. No se trata solo de un cambio de domicilio, sino de un verdadero retiro frente al mar en una mansión que refleja elegancia, confort y funcionalidad, adaptada completamente a sus necesidades de salud.
Durante una entrevista en el programa Hoy, el creador de Una familia de diez reveló que los médicos le recomendaron dejar la altitud de la capital y mudarse a una zona más amigable con sus pulmones. “En la CDMX necesitaba oxígeno 17 horas al día. Acá no lo necesito”, compartió. Su nueva vida no solo es más tranquila, sino también más saludable.
Así es la mansión de Jorge Ortiz de Pinedo en Acapulco: espacios amplios, luz natural y una vista envidiable
Las primeras imágenes de la mansión de Jorge Ortiz de Pinedo salieron a la luz gracias al periodista Álvaro Cueva, quien visitó la propiedad durante una entrevista. El diseño de la casa destaca por su arquitectura abierta, con paredes blancas, ventanales inmensos y decoración tropical, ideal para un entorno playero.
El corazón de la casa es su sala principal, un espacio amplio donde predomina la madera, el azul marino y los sillones blancos. Una mesa de billar adorna el lugar como punto de reunión para visitas o reuniones familiares, en contraste con el estilo minimalista de otras zonas del hogar.
La propiedad cuenta con una terraza que se asoma al Pacífico, donde una alberca y camastros invitan al descanso. Desde ahí, Ortiz de Pinedo puede disfrutar de los atardeceres de Acapulco en completa paz, rodeado del sonido del mar y de un clima más benévolo para su estado de salud.
Además de los lujos visibles, la casa fue pensada para ofrecer todas las comodidades necesarias para que el actor viva con tranquilidad. Hay varias habitaciones distribuidas estratégicamente para alojar a su familia, así como una cocina amplia, cuadros de autor, detalles decorativos en cada rincón y zonas ventiladas que favorecen la respiración.
El entorno lo ha ayudado a mantenerse activo. De hecho, en paralelo a su vida en Acapulco, Ortiz de Pinedo sigue involucrado en la producción de obras teatrales. Una de ellas, No te vayas sin decir adiós, ha sido un éxito en taquilla y marca la despedida de su amigo Juan Ferrara de los escenarios.
La historia de esta mansión va más allá de lo material. Representa un nuevo capítulo en la vida de uno de los comediantes más queridos del país, que a pesar de enfrentar una dura enfermedad, ha sabido reinventarse en un entorno que lo favorece física y emocionalmente.
Hoy, lejos del caos capitalino y rodeado de naturaleza, Jorge Ortiz de Pinedo ha hecho de su hogar un espacio para la salud, la reflexión y el arte. Su mansión no solo es un lujo frente al mar, sino un símbolo de cómo transformar la adversidad en bienestar.
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