El llamado “licuado mágico” se ha vuelto un fenómeno en redes sociales, prometiendo desde bajar de peso hasta “desintoxicar” el cuerpo en cuestión de días. Pero detrás de su fama hay una serie de mitos que vale la pena aclarar. Según especialistas en salud alimentaria, ni todos los licuados son tan saludables como parecen ni todos los mitos son ciertos.
Licuado mágico o falso milagro: los mitos de un fenómeno entre los jóvenes mexicanos
Las dietas con licuados pueden aportar nutrientes o causar excesos; todo depende del balance, los ingredientes y la frecuencia con que los tomes.
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Licuado mágico o falso milagro: los mitos que te impiden disfrutarlo sin culpa
Beber un licuado puede ser una forma práctica de cumplir con la recomendación de consumir cinco porciones de frutas y verduras al día, especialmente para quienes tienen un ritmo de vida acelerado. Sin embargo, también puede convertirse en una fuente de azúcares y calorías ocultas si no se eligen los ingredientes adecuados o si se consumen en exceso.
En el mundo de la nutrición no existen verdades absolutas. Todo depende del contexto, del estado físico y de los hábitos de cada persona. Así que antes de creer en promesas de “energía instantánea” o “cuerpos desintoxicados”, conviene conocer qué hay realmente detrás del famoso licuado mágico.
Licuado o smoothie: ¿cuál es mejor para tu cuerpo?
Aunque muchos los confunden, un jugo no es lo mismo que un smoothie. La diferencia clave está en la fibra: los jugos extraen solo el líquido de la fruta, mientras que los smoothies conservan toda la pulpa y la cáscara, lo que mantiene intactas sus propiedades.
De acuerdo con Fiorella Espinosa, investigadora en salud alimentaria del Poder del Consumidor, el problema de los jugos está en que al eliminar la fibra, el azúcar natural de la fruta entra más rápido al cuerpo, provocando picos de glucosa. En cambio, los smoothies mantienen la estructura completa del alimento y ofrecen una absorción más lenta.
Sin embargo, ambos pueden ser saludables si se consumen con moderación. Lo ideal, señala la experta, es evitar porciones excesivas. Un solo vaso puede requerir cinco o más frutas, lo que significa una alta carga calórica, aunque provenga de azúcares naturales.
Licuado mágico: ¿adelgaza o engorda?
Uno de los mitos más comunes es que el licuado mágico “ayuda a bajar de peso”. Pero la realidad es que ningún batido tiene propiedades milagrosas. Ningún licuado, por sí solo, puede sustituir una alimentación equilibrada.
Espinosa advierte que si una persona consume licuados por la mañana pero mantiene una dieta rica en frituras, harinas y comida ultraprocesada el resto del día, no verá resultados. La pérdida o ganancia de peso depende del total de calorías y nutrientes consumidos, no de una bebida aislada.
Además, los licuados con exceso de frutas o endulzantes pueden aportar demasiada azúcar y energía, lo que termina generando el efecto contrario al buscado.
En los últimos años, muchas empresas han popularizado los llamados jugos detox, que prometen “limpiar” el cuerpo de toxinas. Pero, según los expertos, esta es una idea equivocada.
“El cuerpo se desintoxica todos los días de manera natural a través del hígado y los riñones”, explica Espinosa. Lo que sí es cierto es que los licuados con frutas, verduras y hojas verdes aportan compuestos antioxidantes que ayudan a reducir la inflamación y a proteger las células. Pero eso no significa que el cuerpo se “limpie” más rápido por beberlos.
La moda del licuado mágico ha exagerado sus beneficios. No es un filtro milagroso, sino una forma práctica de aumentar la ingesta de nutrientes cuando la dieta diaria no alcanza las porciones recomendadas.
Cómo preparar un licuado mágico realmente saludable
El secreto no está en el nombre ni en el color verde intenso, sino en el equilibrio de ingredientes. La fórmula más recomendable, inspirada en el método del empresario Joe Cross (Reboot With Joe), es 80% vegetales y 20% frutas.
Las hojas verdes como espinaca, kale o acelga aportan compuestos bioactivos y antioxidantes, mientras que las frutas dan sabor y energía. No obstante, consumir hojas verdes todos los días sin variar puede generar un exceso de oxalatos, lo que podría afectar a personas con tendencia a formar piedras en el riñón.
Por eso, los expertos recomiendan variar colores y tipos de frutas y verduras. En México, donde la diversidad es enorme, alternar ingredientes es la clave para aprovechar sus beneficios sin riesgos.
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