La reducción de la diferencia cambiaria y un mejor saldo turístico impulsaron la recuperación del IVA

La menor brecha de precios influyó en la balanza del gasto turístico y en la mejora de la recaudación del IVA, aunque todavía hay algunas luces amarillas.

La reducción de la brecha de precios mejoró la balanza del gasto turístico y la recaudación del IVA.

Foto: AP

La recuperación en materia tributaria que viene experimentando Uruguay de forma generalizada tras varios trimestres de balance negativo, sobre todo en lo que respecta al IVA, encuentra motivos en dos fenómenos paralelos que, a su vez, están fuertemente relacionados: la reducción de la brecha de precios con Argentina y una mejora en términos de balanza turística con el país vecino.

Así lo expresó el economista Javier de Haedo en el último Monitor de Coyuntura Económica de la Universidad Católica del Uruguay (UCU), para el cual se centró en los últimos datos publicados por el Ministerio de Turismo referidos al sector turístico durante el primer semestre, así como en el Informe de Precios Fronterizos (IPF) más reciente.

“Una mayor afluencia de turistas argentinos y, especialmente, la reducción de las visitas de uruguayos a hacer turismo y compras en Argentina, dan lugar a un aumento del gasto en consumo en nuestro país. Gasto que se había direccionado hacia Argentina por la extraordinaria diferencia de precios”, señaló el economista en el análisis.

Según él, esto llevó a que, desde el último trimestre del año pasado, la recaudación del IVA —que entre el cuarto trimestre de 2022 y el tercero de 2023 tuvo una caída constante— mejorara hasta un 6% entre el segundo y tercer trimestre del año. No de manera causal, esta recuperación coincide con la reducción de la brecha de precios con Argentina que, del máximo récord de 180% en setiembre, pasó a un piso del 50% en marzo.

Si bien el último registro indicó que esta brecha volvió a crecer por segunda medición consecutiva —en mayo ya se ubicó en 59% mientras que, en julio, alcanzó el 80% tras un brusco aumento—, los efectos positivos de la importante reducción en un 72% y, actualmente, en un 55,5% respecto del mayor guarismo todavía impacta de manera positiva en la recaudación, pero también en el turismo.

Subtítulo

La mejora recaudación en la recaudación no es la única consecuencia de la reducción de la brecha de precios entre Uruguay y Argentina, ni tampoco se impulsada solo por este dato económico significativo para el país: la evolución de la balanza turística y, en tanto, del gasto, también forma parte de la ecuación, tal y como señaló De Haedo.

Según los últimos datos del Ministerio de Turismo y el análisis en perspectiva por parte del director del Observatorio de Coyuntura Económica de la UCU —que comparó la información en términos de pesos constantes y no no en dólares, cuyo valor varía con el tiempo de forma no lineal—, “al comparar los primeros seis meses de 2023 y 2024, se observa que el gasto de los argentinos en Uruguay subió 5% mientras que el de los uruguayos en Argentina cayó 34%”.

De esta manera, el saldo del turismo pasó de ser negativo en 66 millones de dólares a tener un balance positivo de 162 millones de dólares entre ambos semestres. Una circunstancia que, claramente, también impactó en una mejor recaudación de IVA y que, a su vez, se vio influenciada por una Argentina menos atractiva para el gasto uruguayo.

Sin embargo, De Haedo advirtió que “no solo importa la diferencia de precios entre los dos países sino también la situación en materia de ingresos en Argentina”: “Con una clase media empobrecida, habrá de transcurrir bastante tiempo antes de volver a alcanzar las cifras de turismo receptivo que conocimos en el pasado”.