El retiro parcial por desempleo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es una de las prestaciones menos conocidas pero más utilizadas en situaciones de crisis económica. Se trata de un apoyo diseñado para dar liquidez inmediata a quienes perdieron su empleo, ya que les permite disponer de parte de los recursos acumulados en su cuenta individual de Afore. Sin embargo, detrás de este beneficio existe un costo oculto que puede comprometer seriamente la futura pensión de los trabajadores.
IMSS: el pequeño movimiento que puede hacerte perder la mitad de tus semanas cotizadas
Un error en el historial del IMSS puede comprometer tus semanas cotizadas y afectar el acceso a tus beneficios.
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Un dato que debes tener en cuenta del IMSS.
En un país donde la estabilidad laboral no siempre está garantizada, muchos mexicanos recurren a esta herramienta sin conocer del todo sus consecuencias. Y es que, aunque puede representar un alivio a corto plazo, el retiro parcial implica una reducción significativa en las semanas de cotización reconocidas por el IMSS, lo que afecta directamente la posibilidad de jubilarse bajo los requisitos establecidos por la ley.
IMSS: qué es el retiro parcial por desempleo
El retiro parcial por desempleo es una ayuda para quienes se quedaron sin trabajo y necesitan dinero. Les permite sacar una parte del dinero que tienen ahorrado en su Afore. Con este trámite, puedes retirar lo equivalente a entre 30 y 90 días de tu salario base de cotización, lo que te da un respiro financiero mientras buscas un nuevo empleo.
Para poder solicitarlo, debes cumplir con dos condiciones importantes: llevar al menos 46 días desempleado y tener la Certificación de Baja del Trabajador Desempleado del IMSS.
Una vez que tu solicitud sea aprobada, la Afore tiene hasta cinco días hábiles para entregarte el dinero.
Pero hay un detalle crucial que casi nadie sabe: al recibir este apoyo, se te descuentan 250 semanas cotizadas de tu historial. Esto es el equivalente a cinco años de trabajo que se borran de tu registro, lo que reduce el tiempo total que llevas acumulado para tu futura pensión.
IMSS: los riesgos para los trabajadores e Ley 73
Para los trabajadores afiliados al IMSS bajo la Ley de 1973, perder 250 semanas de cotización es un problema serio. Este esquema pide como mínimo un total de 500 semanas, lo que se traduce en cerca de 9.6 años de trabajo ininterrumpido, para poder recibir una pensión de vejez.
Cuando un empleado que se rige por esta ley pide un retiro parcial por desempleo, de inmediato se le descuenta la mitad de las semanas que necesita para jubilarse. Si tomamos en cuenta que no todos los trabajadores tienen un empleo estable a lo largo de su vida, esta pérdida podría significar la diferencia entre tener una pensión al retirarse o no.
IMSS: cómo calcular si conviene el retiro parcial
Antes de pedir un adelanto de tu Afore por desempleo, es clave que pienses si te conviene, considerando tus necesidades actuales de dinero y las consecuencias que esto tendrá en el futuro. Lo primero que debes hacer es saber cuántas semanas has cotizado en el sistema.
Puedes checar esta información sin costo en la página del IMSS, donde cada trabajador puede ver su historial de cotizaciones. Si te faltan pocas semanas para llegar a las 500 que se necesitan, pedir un retiro parcial podría ser una decisión muy costosa a largo plazo.
También es importante que analices si hay otras opciones para solucionar tu problema financiero temporal. A veces, un préstamo personal o de un familiar puede ser una mejor alternativa que perder cinco años de cotizaciones. Al hacer tus cuentas, ten en cuenta que esas 250 semanas no solo son tiempo, sino también las aportaciones y rendimientos que se habrían generado durante ese periodo.
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