Crisis del agua: protestas del sindicato de OSE en contra del Proyecto Arazatí

El directorio de la estatal decidió cerrar las puertas del edificio central y hubo incidentes entre los trabajadores y la policía.

Incidentes en las afueras del edificio de OSE.

La Federación de Funcionarios de OSE (FFOSE) se movilizó hasta la sede central de la empresa en la calle Carlos Roxlo en protesta contra la recepción de ofertas para la licitación pública del Proyecto Arazatí. Desde FFOSE entienden que se debe suspender el proceso licitatorio por ser un " pésimo negocio" para la estatal, y además "ser una obra para dentro de 3 años", que no soluciona el actual problema de la crisis hídrica, donde se le está mandado "agua salada" a la gente.

Los trabajadores de FFOSE (acompañados por trabajadores de otros sindicatos), no fueron recibidos por parte del directorio de OSE, quienes decidieron cerrar las puertas del edificio. La tensión afuera de la sede escaló al punto en que hubo incidentes entre los manifestantes y la policía, que los instaba a retirarse.

En diálogo con Subrayado, el representante de FFOSE, Federico Kreimerman, indicó que el proyecto Arazatí es un mal negocio, ya que "el privado gasta 200 millones de dólares" y luego la estatal "termina pagándole, por 20 años, 800 millones de dólares". "Nuestro planteo es que suspendan y estudien soluciones serias, lamentablemente no hemos sido escuchados", aseguró.

"No pudimos dialogar con ninguna autoridad desde temprano", remarcó Kreimerman, puesto que "el directorio eligió trancar las puertas del edificio".

Incidentes en una de las puertas laterales del edificio de OSE

Los incidentes con la policía se dieron en una de las puertas laterales del edificio de OSE, luego de que los manifestantes buscaran forzar el ingreso a las instalaciones para hablar directamente con el presidente de la empresa estatal, Raúl Montero, como les había sido impedido en primera instancia.

En un principio, las protestas habían comenzado dentro del propio edificio, pero luego continuaron en la explanada de la sede, donde el directorio mandó cerrar las puertas y se les impidió el reingreso. Luego de los incidentes, la protesta se tornó pacífica y los policías se retiraron.