La Federación Rural ya se anticipa a un magro balance económico en el año con conversaciones con el Banco Central del Uruguay (BCU) en torno a posibles “contemplaciones” para el sector en cuanto al acceso a créditos y a la plaza financiera.
El agro pidió al BCU facilidades de crédito ante las previsiones de un magro balance económico
La Federación Rural se reunió con autoridades de la Superintendencia de Servicios Financieros y planteó la necesidad de consideraciones especiales para productores.
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El ejercicio agropecuario 2023/2024 no fue el mejor para la mayoría de los productores rurales, impactados de lleno por la sequía histórica que sufrió el país y los efectos residuales que ésta generó en las cosechas. Ahora, el ejercicio 2024/2025 no promete ser, tampoco, de resultados excepcionalmente positivos, por un lado por las inundaciones y excesivas lluvias que se dieron durante los primeros meses del año; pero, principalmente, por los bajos precios de los commodities en los mercados internacionales que, según las proyecciones, no tendrán un repunte a corto o mediano plazo.
Con este escenario, la Federación Rural emitió un comunicado pidiendo “contemplaciones” al BCU respecto a la categorización del sector agropecuario y sus actividades ante las entidades bancarias. Y el lunes se reunió con autoridades de la Superintendencia de Servicios Financieros del Banco Central.
En el encuentro —al cual la directiva de la gremial acudió junto con el economista y asesor honorario Milton Ramallo y el contador Juan Manuel Machado—, se conversó sobre “las categorías y cómo cambian en los créditos”, tal y como comentó el presidente de la Federación Rural, Jorge Andrés Rodríguez.
“La función del Banco Central, a nivel de la Superintendencia, es cuidar del riesgo de la plaza financiera y de los ahorros, y en la clasificación de crédito ellos trabajan con mucha información que reciben de los distintos sistemas”, señaló el gremialista agropecuario, a partir de la información que se les dio en la reunión, la primera realizada entre esa área de la entidad monetaria y una institución que no es de carácter financiero.
El pedido de los ruralistas al BCU
En el marco del encuentro, la Federación Rural le manifestó a la Superintendencia de Servicios Financieros que los resultados económicos de las empresas agropecuarias están condicionados a situaciones “exógenas o extra empresa que afectan a los mismos, sin uno haberlo pensado de que iba a ser así”.
“Nosotros pensamos que los resultados de este ejercicio van a ser muy magros, y por eso estamos buscando una forma de que exista una contemplación para los productores que necesitan crédito para sobrellevar este momento”, explicó Rodríguez a El País.
“Fue una buena reunión, lo importante es que conozcan de primera mano la situación del productor”, concluyó el presidente de la gremial, sin adelantas posibles resultados o acuerdos en función de lo reclamado.
Cabe recordar que la relación del sector agropecuario y el BCU lleva varios meses de tensión en torno a la cuestión de lo que, desde el agro, señalan como atraso cambiario y que, desde la autoridad monetaria —si bien admiten el desalineamiento del tipo de cambio— no entienden como una situación prioritaria o necesaria de intervención.
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