2 de enero 2023 - 11:13

Lula, ¿un liderazgo capaz de eclipsar los planes de Lacalle Pou?

China, EEUU y el Mercosur son prioridades para el presidente de Brasil. ¿Se debilitará la agenda aperturista de Uruguay?

Lula da Silva retomó el poder en Brasil con la revitalización del Mercosur entre sus prioridades.

Lula da Silva retomó el poder en Brasil con la revitalización del Mercosur entre sus prioridades.

Foto: BELTRÃO

El regreso de Lula da Silva al poder en Brasil genera todo tipo de expectativas, no solo en la región sino también a nivel mundial y podría convertirse en un freno para el acelerado plan de apertura comercial global que defiende el presidente Luis Lacalle Pou, quien ya ha tratado de contrarrestar esos efectos con la invitación hecha al mandatario de izquierda para que visite Montevideo este mes.

El primer gran freno puede venir desde las relaciones con China y el ya demorada Tratado de Libre Comercio (TLC). El gigante asiático es el principal socio comercial de Brasil desde 2009 –el año pasado el comercio bilateral alcanzó los u$s 135.000 millones- y su compañero dentro del grupo de los BRICS. La opinión de Brasilia, aunque no sea determinante, será de peso para diseñar los próximos pasos a dar en Sudamérica.

No es casual que entre las prioridades en la agenda internacional de Lula se encuentre un viaje a Pekín en el primer trimestre del año.

https://twitter.com/LulaOficial/status/1609745333625536515

¿Con Estados Unidos también?

Pero el huracán Lula no sólo genera alboroto en socios tradicionales. El Washington de Joe Biden mira con beneplácito su regreso al poder y, en especial, su agenda para la Amazonia, aunque eso es solo un interés en común de una agenda que puede volverse mucho más extensa.

Estados Unidos tuvo un rol importante durante la campaña electoral y los comicios en Brasil para asegurar que hubiera un respeto a la continuidad institucional, so pena de imponer sanciones si no se reconocía el resultado electoral.

El regreso de Lula al Planalto, un político con el que Biden se sentiría más cómodo que su antecesor Jair Bolsonaro, ocurre en momentos en que Washington busca nuevos socios en América Latina.

Hace apenas dos semanas, dos influyentes congresistas instaron a la Casa Blanca a avanzar en pactos comerciales con Ecuador y Uruguay. Pero el gobierno podría optar por profundizar relaciones con un actor económico mayor, como lo es Brasil, sexta economía del mundo.

El tema de los vínculos comerciales con Estados Unidos ya fue puesto en la agenda de los grandes empresarios fintech Marcos Galperín (MercadoLibre) y Martín Migoya (Globant) que instaron a Luis Lacalle Pou a mejorar la conectividad aérea, entre otros, para acelerar el ritmo de negocios bilaterales. El país del norte es el quinto destino de las exportaciones uruguayas, superado por China, Brasil, la Unión Europea (UE) y Argentina.

Revitalización del Mercosur

A nivel regional, se aleja la posibilidad de una modernización del Mercosur que, en el formato ideado por Uruguay, representa una flexibilización de un bloque que considera obsoleto e irrealizado.

Luego del triunfo electoral a fines de octubre pasado, Lula da Silva y el presidente argentino, Alberto Fernández, iniciaron acelerados intercambios sobre cómo relanzar el Mercosur bajo los estándares de mayor cooperación intrarregional, un proyecto que se extenderá a otros organismos latinoamericanos y que, previsiblemente, comience a concretarse en la cumbre de la Celac de fin de mes en Buenos Aires.

Se trata de un cambio de 180 grados frente a la gestión de Bolsonaro quien, si bien no compartía específicamente los reclamos de cambio de Lacalle Pou, tampoco se oponía a ellos ya que el bloque sudamericano no corría entre sus intereses de gobierno.

Un posible golpe de efecto en la política interna

La preocupación por un efecto contagio de la restauración progresista en América Latina surgió en las filas de la coalición de gobierno la mismísima noche en que Lula da Silva ganó el balotaje.

A esa noche le siguieron proclamas del presidente Luis Lacalle Pou sobre que la ola de izquierda no llegaría a Uruguay, un intento de calmar a las tropas días antes de una reunión partidaria que finalmente no ocurrió.

Desde la oposición, el Frente Amplio no ocultó su esperanza de capitalizar el regreso de Lula al poder en un regreso de la izquierda al gobierno en Uruguay. No es casual que la campaña interna esté más que asentada dentro de la izquierda con cuatro precandidatos en liza.

Aunque falta, y bastante, para las elecciones generales de 2024, los sondeos de intención de voto de distintas consultoras muestran al FA liderando. Ayer, el expresidente José “Pepe” Mujica se jactó de la excelente sintonía con su “amigo” Lula da Silva la cual, en sus palabras, le permitió ser “locatario” en Brasilia.

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