El Banco de Previsión Social (BPS) pondrá en marcha un plan piloto de subsidios de alquiler para jubilados en Uruguay, con el objetivo de modernizar y hacer más efectivo el programa de solución habitacional del organismo, y reducir hasta en un 50% la demanda insatisfecha del sector en un menor plazo.
El BPS comenzará a subsidiar alquileres para jubilados
El directorio del organismo previsional tratará esta semana un plan piloto como nueva alternativa de solución habitacional.
-
Director del BPS advirtió los riesgos de realizar un plebiscito por la reforma de la seguridad social
-
Reforma de la seguridad social: ¿Cómo asesorará el BPS a los futuros jubilados?

El BPS analiza subsidiar alquileres para jubilados en Uruguay.
El presidente del BPS, Alfredo Cabrera, explicó en diálogo con Radio Carve que el directorio del organismo tratará esa nueva alternativa el actual Programa de Vivienda para jubilados que existe en el país, y que comenzará a aplicarse en siete y ocho localidades hasta fin de año. El primer objetivo es adjudicar unas 100 soluciones de alquiler para aquellos jubilados que reúnan las condiciones objetivas necesarias y que, actualmente, integran la lista de espera del programa vigente.
Críticas al actual programa y alternativas para mejorar el sistema
Según Cabrera, el actual Programa de Vivienda para jubilados —creado en 1987— tiene diversas falencias que hacen que la iniciativa —muy exitosa en sus comienzos, cuando estaban los recursos necesarios para la construcción de los complejos habitacionales— “esté condenada en el largo plazo a volverse inviable”.
Por un lado, muchos de los edificios para los jubilados fueron construidos con otra finalidad —unidades habitacionales pensadas como “primera vivienda” y no como una “última vivienda”—, además de haber quedado en lo que hoy son zonas rojas, por lo que las personas no quieren ir o no es conveniente que estén. Esto resulta en que muchas unidades estén vacías.
Además, el actual modelo de edificios de jubilados va en contra de los principios del envejecimiento activo, que proponen la integración de las personas en los entornos en los que viven.
El costo del programa es el mayor problema
Sin embargo, el mayor problema del actual programa de solución habitacional es su costo: según explicó Cabrera, cada vivienda tiene un costo de construcción promedio de 60.000 dólares, mientras que su mantenimiento y administración sale 1.500 dólares por año. Si, además, se tiene en cuenta que cada edificio demora cuatro años en construirse, la iniciativa demora mucho en llevar soluciones a los jubilados y resulta en importantes gastos para la institución.
Ante este diagnóstico, el BPS avanza en un cambio de enfoque: en lugar de subvencionar la demanda, el nuevo plan buscará subvencionar la oferta con subsidios directos sobre los alquileres.
Este subsidio será completo y con un tope máximo establecido a partir del índice medio del alquiler elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y la media de alquileres en cada localidad. “No queremos tocar el mercado ni tener ninguna incidencia que cambie las condiciones de los alquileres”, explicó Cabrera, al respecto.
Esta alternativa, además de ser más veloz —en tanto plantea, por ejemplo, una negociación directa con los propietarios por parte del BPS— y más integracionista, es menos costosa, ya que actualmente, el costo medio del alquiler por año es de 5.500 dólares. “Es una utilización de los recursos del Estado muchísimo más eficiente que va a permitir reducir en un 50% la demanda insatisfecha en plazos mucho más cortos”, señaló el presidente del organismo.
Esta solución se propondrá a los jubilados que actualmente integran la lista de espera del actual Programa de Vivienda, que actualmente son un 4.000 en todo Uruguay.
Dejá tu comentario