29 de septiembre 2025 - 10:00

Estos jamones mexicanos no son jamones en 2025 y Profeco los reprueba

Profeco reveló en 2025 qué jamones no son jamón en realidad. Varias marcas fueron reprobadas y la institución dio consejos clave para elegir mejor.

Estos jamones mexicanos no son jamones en 2025 y Profeco las reprueba

Estos jamones mexicanos no son jamones en 2025 y Profeco las reprueba

La Profeco volvió a encender las alertas de los consumidores en México. En julio de 2025, la institución publicó un estudio sobre 40 marcas de jamón que se venden en los principales supermercados del país. El resultado sorprendió a más de uno: varias marcas reprobaron porque no cumplen con lo estipulado en la Norma Oficial Mexicana y, en algunos casos, ni siquiera deberían llamarse “jamón”.

El análisis, publicado en la Revista del Consumidor, expuso irregularidades que van desde exceso de nitritos hasta niveles de proteína y sodio distintos a los declarados en el empaque. Esto significa que muchas personas han comprado productos que no son lo que parecen, con un aporte nutrimental menor al esperado.

El hallazgo no es menor. El jamón es uno de los embutidos más consumidos en México, presente en tortas, desayunos y refrigerios escolares. Que un producto tan popular no cumpla con los estándares oficiales genera preocupación no solo por un tema de engaño al consumidor, sino también por los riesgos a la salud derivados de altos niveles de sodio o aditivos.

Profeco: los jamones que no son jamones en 2025

De acuerdo con Profeco, el verdadero jamón debe elaborarse únicamente con pierna trasera de cerdo o muslo de pavo. Sin embargo, algunas marcas comercializan productos bajo denominaciones como “embutido cárnico”, “producto cárnico cocido” o “embutido de pavo”, lo que les permite incluir ingredientes como pollo, pasta cárnica, soya, fécula o aditivos en exceso.

El estudio identificó 9 marcas reprobadas. Entre ellas destacan:

  • Bafar Jamón de Pavo Virginia: declara 12 % de proteína, pero solo contiene 11.2 %.

  • FUD Jamón de Pierna Horneado: indica 12 % de proteína, pero tiene 11 %.

Granja Món Plus Jamón Virginia de Pavo
 Estos jamones mexicanos no son jamones en 2025 y Profeco las reprueba

Estos jamones mexicanos no son jamones en 2025 y Profeco las reprueba

  • Bafar Pavo Jamón Americano: declara 9 % de grasa, aunque en realidad solo contiene 1.8 %.

  • Nutri Deli Jamón de Pierna Horneado: señala 780 mg/100 g de sodio, pero se detectaron 1198 mg/100 g.

  • Zwan Premium de cerdo y pavo: declara 771 mg/100 g de sodio, pero contiene 915 mg/100 g.

A estos casos se suman marcas que utilizan la palabra “jamón” en su empaque cuando en realidad no cumplen con la Norma Oficial Mexicana. Entre ellas: Aurrera, Chimex, Nutri Deli, San Antonio, Galicia Virginia, Kir Lunch, Duby y Tres Castillos, entre otras.

Profeco enfatizó que estos productos engañan al consumidor al colocarse junto a los jamones reales en los refrigeradores de supermercados, pese a que su aporte nutrimental es menor.

Profeco: recomendaciones al comprar jamón en México

La institución recomendó a los consumidores ser más cuidadosos al momento de elegir embutidos. Estas son las principales recomendaciones:

  • Verifica que sea jamón real. Busca en la etiqueta que indique claramente “jamón de cerdo” o “jamón de pavo”. Evita productos que solo se llamen “embutido” o “producto cárnico”.

  • Lee la tabla nutrimental. Revisa el contenido de proteína, sodio y grasa. La OMS recomienda no exceder 2 gramos de sodio al día.

  • Evita productos con muchos sellos. Si el empaque muestra “exceso de sodio” o “exceso de grasas”, lo mejor es moderar su consumo.

Jamón cocido.jpg
 Estos jamones mexicanos no son jamones en 2025 y Profeco las reprueba

Estos jamones mexicanos no son jamones en 2025 y Profeco las reprueba

  • Conserva la cadena de frío. Profeco sugiere que el jamón sea lo último en colocarse en el carrito y lo primero que se refrigere al llegar a casa.

  • Compra en lugares fijos y confiables. Así reduces el riesgo de que el producto haya perdido calidad.

  • Consulta a tu médico si tienes hipertensión. Por su contenido de sodio, no es recomendable para quienes siguen dietas restringidas en sal.

Aunque el jamón puede aportar proteína de calidad y minerales como selenio, su consumo debe ser moderado. El exceso de carnes procesadas se ha relacionado con hipertensión, cáncer y otras enfermedades crónicas.

Dejá tu comentario

Te puede interesar