Charlas de quincho: estrategias de campaña, encuestas y meses complicados

El candidato del Frente Amplio Yamandú Orsi se mantiene alto en las encuestas sin participar en debates ni eventos mientras se especula sobre su equipo económico, que podría ser clave luego de lo que se perfila como un tiempo difícil en inversiones.

El Frente Amplio se mantiene en las encuestas, lo que le da margen en la estrategia de campaña.

Foto: @MPP609

La concurrencia desbordó la sala 2 del Complejo Cultural Alfabeta en Pocitos. Se presentaba el nuevo libro sobre el pensamiento económico del economista Gabriel Oddone, de autoría del periodista Nicolás Batalla. Se titula “El Despegue: cómo crecer y distribuir en Uruguay”. Oddone se ha constituido en los últimos años en un economista de referencia en la discusión sobre estos asuntos en el Uruguay. Y desde que se lo ha mencionado como eventual ministro de Economía en caso de que Yamandú Orsi llegue a la Presidencia, de la mano del Frente Amplio, está literalmente en el centro de la atención. El propio Orsi tenía su lugar reservado en la primera fila y allí estuvo para escuchar la presentación del libro, que estuvo a cargo de Fernando Filgueira e Isabelle Chaquiriand, con la moderación de Victoria Gadea. Al lado de Orsi el senador Alejandro “Pacha” Sánchez, quien ha sido designado coordinador de la campaña frenteamplista.

La concurrencia incluía destacados empresarios, como Nicolás Jodal, fundador de Genexus (software), figuras públicas prominentes como Enrique Iglesias (expresidente del BID), políticos frenteamplistas como la diputada Cristina Lustemberg, gente del ambiente financiero como el expresidente de la Bolsa de Valores de Montevideo, Pablo Montaldo, y -por supuesto- economistas vinculados al Frente Amplio como el exministro de economía Álvaro García.

También referentes importantes de otras tiendas políticas. Al lado de la directora ejecutiva de la Asociación de Bancos Privados del Uruguay (ABPU), la economista Bárbara Mainzer, estaba cómodamente ubicado el exministro de Economía doctor Ignacio de Posadas, referente del Partido Nacional y del pensamiento liberal uruguayo. “Y había otros que lejos están de ser de izquierda”, agregó un seregnista de la primera hora, con particular afinidad con Oddone. “Esta convocatoria no es solo por el interés político que despierta hoy Gabriel; es un tipo que ha cultivado muy buenas relaciones… don de gente”, comentó.

“¿Y Pablo Ferreri y no viene?” preguntó mordaz una periodista mientras acomodaba el grabador y el auricular para el contacto en vivo que tenía previsto durante la presentación. “Tranquila", le contestó un dirigente del FA que asistía a la presentación. “¡Mirá! Ahí viene llegando” le respondió, mientras el contador Ferreri -que en la interna se constituyó en referente económico de Carolina Cosse- entraba a la sala, algo agitado, ya sobre la hora del inicio del evento. No está fácil para estacionar en Pocitos.

Ansiedad

Era una tarde lluviosa y la gente se apretaba para entrar a la presentación del libro. Al empresario se le complicaba para hacerse un aparte con un dirigente del MPP, al que conoce desde joven, para hacerle la pregunta de cajón. Finalmente lo logró. “¿Ya está confirmado Oddone como futuro ministro? porque Castillo le sacó la amarilla…”, le dijo. “¡Epa! ¿tas ansioso? tiempo al tiempo… “, respondió el dirigente. “Eso que me decís fue durante la campaña para las internas, seguramente un recurso para captar algo más de votos entre los frentistas más ortodoxos, pero -como habrás visto- no salió bien la jugada, no tuvo mucho efecto. Además, dudo que haya un cuestionamiento directo a Oddone”, agregó. “Ah… entonces es el nombre cantado”, aseveró para preguntar el empresario. El dirigente rió y respondió: “No nos precipitemos, que vamos bárbaro”.

Números

En efecto, que las encuestas le están dando bien al FA es indudable y eso está detrás de la decisión de Yamandú Orsi de no participar en debates o presentaciones en los que estén presentes más de un candidato a la presidencia de los partidos de la coalición. Tampoco está dando entrevistas; prefiere recorrer el país y participar en eventos elegidos. Uno de ellos fue en la Universidad ORT, donde estuvieron todos los principales candidatos a la presidencia, para firmar una declaración conjunta contra el antisemitismo y la discriminación.

Durante el evento, un abogado de habitual presencia en los medios no logró contener su curiosidad sobre asuntos políticos y encaró a uno de los integrantes del equipo de comunicación de Orsi. “¿No debería salir más en público?” Su interlocutor le respondió: “¿Y vos qué harías en mi lugar? Los números nos vienen dando muy firmes y el Frente Amplio es favorito; hay encuestas que ya dieron 45% y alguna en los próximos días va a dar 46%”, respondió optimista. “¡Con esos números el FA está cerca de la mayoría parlamentaria! ¿A vos te parece que hay que arriesgar, en una campaña que es corta y difícil?”

El abogado sonrió pero quedó sin una respuesta inmediata, pensando en los buenos argumentos de la campaña de Orsi. Pero buscó replicar. “Pero la gente pide que él se pronuncie. Empresarios, pero también mucha otra gente quiere tener definiciones más concretas; entiendo lo que decís acerca de la situación de favoritismo pero seguir con esa estrategia de aquí a octubre parece difícil ¿no?”, preguntó. “Veremos”, le respondió el dirigente, mientras se ponía a la par de Orsi, que ya se retiraba del local universitario.

El candidato no pudo evitar las preguntas de los movileros sobre Venezuela. “No creo en los resultados de Maduro”, declaró.

Inversiones

La ejecutiva entró unos minutos más temprano a la reunión abierta del comité de inversiones del banco. La oficina, en un piso alto del World Trade Center estaba iluminada por netos rayos del sol vespertino, que entraban por la ventana. “¿Bajo un poco la persiana?”, preguntó. “No, así está bien…”, le respondieron. “Te noto preocupado…”, le dijo ella a uno de los economistas del comité, que se había adelantado a la reunión. “Bueno… no está fácil la cosa; ha habido mucho movimiento en las bolsas.. Pero… ¿sabes lo que más me preocupa? Desde abril que prácticamente no están entrando capitales al país; por supuesto que hay excepciones, pero confirman la regla: el escenario ha cambiado mucho, la verdad”, respondió sin cambiar el semblante de preocupación.

La ejecutiva se lo quedó mirando, con inquiriendo algo más. El experto continuó: “en el mundo ahora se está diciendo que Estados Unidos bajará la tasa de interés, cosa que seguramente hará porque allá aumentó el riesgo de una recesión… pero no hay que confundirse…”, agregó. “¿En qué sentido?”, volvió a preguntar ella. “Que estamos ahora en un mundo con tasas reales de interés claramente positivas, como hace décadas no se veía, ¿me seguís? Los bancos centrales subieron fuerte las tasas para bajar la inflación, y lo lograron. Pero eso no quiere decir que volvamos a un escenario de dinero barato. Ahora los bonos pagan buenas tasas…”.

La charla siguió por unos minutos. “¿Y cómo incide acá en Uruguay? Porque a pesar de la caída en las bolsas, aquí estuvo más bien tranquilo ¿no?”. El economista se inclinó sobre la mesa y cruzó los dedos, como buscando precisión en la respuesta. “Es cierto: Uruguay tiene grado inversor y un prestigio muy bien ganado, que lo diferencia notoriamente de los países de la región; por ahí no hay problemas. Hubo cierto aumento en el riesgo país pero el manejo que se está haciendo de la deuda es impecable en todo sentido”, agregó. “¿Entonces? ¿Cuál es el problema? se te nota bastante preocupado”, respondió su interlocutora.

“El tema es que las inversiones han sido un motor clave para el crecimiento de la economía. Obviamente los grandes proyectos de UPM y otros, pero también mucha inversión inmobiliaria que ha llegado de Argentina y otros lados, y por supuesto la propia inversión local, que es clave. Pero ahora, con tasas de interés atractivas, aunque bajen en los próximos meses, la disposición a invertir, a ingresar capital al Uruguay ya no es la misma... Además los precios del agro están bajando, especialmente la soja que ha sido un gran impulsor de la agricultura. Y -por si fuera poco- Argentina todavía está lejos de normalizar su situación. Se vienen meses bastante complicados”, respondió en un aluvión de comentarios que trasladó la preocupación a su compañera. Ya llegaban el resto de los integrantes del comité y empezaban a tomar asiento. Uno preguntó: “¿dejamos la persiana en alto? ¿No les molesta el sol?”. “Dejala así, que esta luz cálida no viene mal”, respondió la ejecutiva, que ya abría su notebook para iniciar la reunión.