Charlas de quincho: resquemores de Ripoll, euforia colorada y selfies

La interna se enciende en la coalición de gobierno y los empresarios van cediendo a los encantos de Andrés Ojeda.

Ojeda despertó aplausos entre los asistentes al Día del Exportador.

El candidato a la Presidencia por el Partido Colorado, Andrés Ojeda, estaba eufórico con la última encuesta de Opción, primera luego de las elecciones internas. Allí el Partido Colorado aparece con 13% de intención de voto. Y lo más interesante para los colorados: están a siete puntos del Partido Nacional, que lidera entre los partidos de la coalición. “Estamos casi dentro del margen de error”, comentan optimistas en el entorno de Ojeda. “¿No será demasiado optimismo?”, le retrucó un periodista no tan joven como sus interlocutores colorados y ya añejado en campañas electorales de este tipo, cuando ciertos sondeos prometen algo que luego queda por el camino.

Los colorados discrepan: “Fíjate que el discurso de Andrés está prendiendo… y algo muy interesante: mientras Álvaro Delgado es -obviamente- la continuidad del Partido Nacional, no puede pegarse tanto a Luis Lacalle Pou, porque perdería perfil propio; en cambio, Andrés puede citar a Lacalle Pou en sus discursos, acercándose a quien es hoy la figura más popular de la política uruguaya, y no pierde su propia impronta”.

“Es un discurso muy bien planeado”, comentó alguien que está siguiendo de cerca el fenómeno del candidato colorado. “Ojeda apuesta a lo nuevo vs. lo viejo; futuro vs. pasado. Hay mucha gente en el ámbito político (en el oficialismo y en la oposición) que ven esto como algo frívolo, sin sustancia… grave error”, afirmó levantando una ceja.

Algo de esto se confirmó en la presentación de los candidatos en el evento por el Día del Exportador. Después de que casi todos criticaran a Yamandú Orsi (candidato del FA) por no asistir, presentaron sus propuestas a un concurridísimo auditorio. “No faltó nadie ¿eh? Y viste que el único que levantó aplausos fue Ojeda…”, dijo picante un empresario de la logística cercano al Partido Colorado. En las charlas al paso, mientras la gran concurrencia iba dejando el Club de Golf, se repetían los comentarios sobre el buen desempeño del candidato colorado. Sin embargo, otro empresario, más afín a los blancos, comentó ácido: “qué se yo… sí, capaz este actor de cine le complica algo la campaña a Álvaro, pero el Partido Nacional tiene un liderazgo muy claro… el partido es con el FA”, dijo terminante, mientras se subía a su SUV.

Preocupación

Si en el Partido Colorado las encuestas generaron entusiasmo, entre los blancos todo lo contrario. Y ya hay algunos que se apresuran a adjudicar razones. “Que Artigas, que Ripoll… tranquilos!, el camino no está fácil pero falta mucho…”, buscó tranquilizar un dirigente herrerista, mientras iba camino a la presentación del equipo económico de Álvaro Delgado. Precisamente, el candidato blanco hace reiterado énfasis en las virtudes de la conducción económica actual. “Si me preguntabas hace unos días, tenía dudas”, comenta una joven economista, del cerno del gobierno. “Pero ahora que el déficit ha tenido un descenso, el empleo sigue firme y la actividad y las exportaciones se recuperan, creo que vamos por el buen camino”, afirma optimista, mientras repasaba otros números. “Además, el dólar ha tenido un cierto repunte… ¡avisale a los exportadores!”, lanzó con una risa corta.

Herrerismo

“Era uno de los eventos que me daban más miedo”, confesó Valeria Ripoll a uno de sus más próximos allegados. La presencia de la fórmula presidencial blanca en el Congreso del Herrerismo era una prueba de fuego para la candidata a la vicepresidencia del Partido Nacional, que acompañó a Álvaro Delgado en su visita al Centro Gallego, donde el herrerismo estaba desarrollando su encuentro.

"Y la verdad es que estuvo excelente, un ambiente muy positivo”, agregó la ex secretaria general de Adeom, hoy en filas blancas. Su discurso pasó entre otras cosas por el reconocimiento al Herrerismo como sector político y su vocación por los más humildes. Varias miradas se cruzaron entre los militantes y dirigentes herreristas, con Delgado. El propio candidato a la Presidencia también tenía, él mismo, una prueba importante en ese acto. “Hay que seguir”, comentó en tono algo resignado, un veterano dirigente del herrerismo montevideano, aún golpeado por el caso Penadés.

Los dirigentes jóvenes son más optimistas. “La verdad es que todos los resquemores que en su momento generó la designación de Ripoll han quedado ya casi todos de lado… Es cierto que fue algo sorpresivo, pero te reitero algo que comenté con otros: con Laura el escenario no era auspicioso”, dijo bajando un poco la voz al referirse a la economista Laura Raffo, cuya votación estuvo muy por debajo de lo esperado por el sector. “Ahora hay que enfocarse en la campaña hacia octubre, fijate que el Frente tiene ventaja en las encuestas…”, dijo torciendo el labio. “La vamos a descontar”, dijo confiado un dirigente del interior que llegó hasta Montevideo para el encuentro.

Tarifas

“¡Otra vez nos subieron las tarifas!”. La queja (que no es nueva) volvió a escucharse en ocasión del 108 aniversario del Centro de Navegación, que se celebró en el Radisson. Fue expresada por jerarcas de alguna de las navieras que operan en el Puerto de Montevideo respecto a un nuevo ajuste al alza en las tarifas de la Terminal Cuenca del Plata. “Linda forma de festejar…”, agregó punzante mientras consultaba el celular confirmando lo que recién le habían enviado por WhatsApp.

En realidad, el ajuste refiere a determinados límites que se definen de manera más estricta en la entrada y salida de contenedores y en el plazo de depósito libre, es decir los días que puede estar un contenedor sin pagar playa de depósito. “En ciertos casos el costo se ha más que duplicado”, abundó en la queja un empresario que tiene ya varios teus arriba en comercio portuario.

Los problemas de costos y competitividad se siguen planteando en el ámbito portuario. Sin embargo, desde la ANP la visión sobre la situación actual es muy positiva. “la actividad del Puerto sigue marcando récords y se aspira a seguir con esta estrategia”, comentó entrando al Ball Room del hotel un veterano jerarca portuario. “En la medida que empiece a expresarse con más movimientos el aumento en la profundidad del canal de acceso, con el dragado, los números serán cada vez mejores… además… “, hizo un pausa. “Fijate los que se quejan, sacándose sonrientes una foto con los de Katoen Natie (accionista mayoritario de TCP), y éstos con sus acérrimos competidores de Montecon”, señaló, intercalando una risa socarrona. “¿En qué quedamos? No es para tanta alharaca: todos se quejan por los costos, pero al final estamos todos en el mismo barco”, bromeó.