El Partido Nacional (PN) siguió con atención, en la campaña electoral, la merma del apoyo a su candidato, Álvaro Delgado, y el crecimiento paralelo del colorado Andrés Ojeda, al punto tal que el abogado estaba convencido en que es probable dar el batacazo e ingresar al balotaje.
El Partido Nacional se fortaleció en el interior rural para contener el avance de Andrés Ojeda
La fuerza de Álvaro Delgado acertó con las encuestas de las horas previas a las elecciones 2024 que mostraban un freno en el crecimiento del colorado.
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La preocupación por la baja en los sondeos del exsecretario de la Presidencia, que se impuso masivamente en las internas de junio con 74,3% de los votos, fue importante en las últimas semanas de la campaña, pero cierta sensación de alivio se abrió lugar en la previa a las elecciones 2024 de la mano de números que manejaba el PN.
Esos datos, comentaron fuentes blancas a Ámbito, mostraban una mejora en el apoyo que recibe Delgado y una pérdida del que había obtenido Ojeda, algo que algunos adjudican a los traspiés finales de su campaña, debido a la polémica por una conocida que publicó fotos cazando –que el colorado denunció como una fake news- y por los exabruptos con la prensa. Se trata de mediciones realizadas para el Partido Nacional en los últimos días, dijeron.
En la fuerza que lidera la coalición de gobierno estimaban que Ojeda podía sacar una diferencia de votos frente a Delgado en Montevideo. Pero se mostraban convencidos de que el voto en el interior, sobre todo el rural, de fuerte lazo con el Partido Nacional y que normalmente no es medido en las encuestas de intención de voto, iba a ser la clave para garantizar que no se revierta el actual equilibrio de fuerzas, algo que pareció haberse verificado en las urnas.
Es que el porcentaje de votos que recibieran tanto Delgado como Ojeda no sólo iba a ser definitorio para saber quién de los dos pasaría a la segunda vuelta de noviembre para enfrentar al frenteamplista Yamandú Orsi, sino para determinar el reparto de escaños en el Parlamento.
El Partido Colorado aspiraba a tener mayor protagonismo en el seno de la coalición, cuyo equilibrio de fuerzas se vio actualizado tras los resultados electorales.
Esas variaciones serán las que argumentará Ojeda, tercero en la primera vuelta electoral, para imponer la que es su visión de cómo deben funcionar las negociaciones por los cargos en la coalición: experiencia por sobre gestión y capacitación en el área por sobre cercanía política con quien lidere la alianza multicolor.
El planteo apunta directamente al Ministerio del Interior, a cargo de las políticas de seguridad y reservado históricamente para alguien de confianza del presidente. El Partido Colorado, no obstante, tiene un extenso listado de candidatos para el puesto en caso de que Delgado sea electo presidente.
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